Acta de nacimiento indígena de la nueva Bolivia
Evo Morales pidió todos los poderes para la ayer instaurada Asamblea Constituyente. Una Asamblea en la que asoma, por primera vez y con fuerza, la mujer, y que tiene como objetivo refundar el empobrecido país tras el definitivo despertar indígena ratificado en las elecciones de finales del pasado año. Ya llega la nueva Bolivia.
SUCRE
El presidente de Bolivia, Evo Morales, pidió plenos poderes, incluso por encima de él, para la Asamblea Constituyente, de la que saldrá una nueva Carta Magna con el objetivo de refundar el país andino. «No estamos hablando de una simple reforma constitucional, estamos hablando de refundar Bolivia», recordó el el jefe de Estado, quien añadió que para modificar la actual Constitución no era necesaria esta asamblea elegida en las urnas el 2 de julio pasado. Morales presidió los actos de instauración de la Asamblea en la ciudad sureña de Sucre, capital oficial del país, aunque la sede del Gobierno está en La Paz. El escenario elegido, el frontis de la Casa de la Libertad, estaba cargado de simbolismo ya que fue en este lugar donde se firmó en 1825 el Acta de la Independencia que liberó al país de las garras españolas. El máximo mandatario de Bolivia señaló que, con el inicio de las deliberaciones de los 255 constituyentes que conforman la Asamblea, ha llegado «el gran día» para los pueblos originarios, expresión que repitió en varias lenguas indígenas. Recordó la opresión sufrida por los indígenas en los 500 años transcurridos desde la conquista de América, pese a ser un grupo mayoritario. La Asamblea Constituyente que se puso en marcha ayer es, además, una oportunidad histórica para que las mujeres participen en la reestructuración del país más empobrecido de Sudamérica. El 34% de los constituyentes son mujeres y, por primera vez en la historia del país, la Asamblea estará presidida por una mujer, Silvia Lazarte, una combativa dirigente campesina quechua que inició su carrera sindical a los 13 años.
La mujer y la historia
La asambleísta aimara Dora Arteaga, también del gubernamental Movimiento al Socialismo (MAS) mostró su esperanza en que las mujeres pueden hacer historia con su participación. «No somos ignorantes y podemos ayudar al progreso del país, no como los políticos tradicionales, que han dejado tan mal a Bolivia», recordó. De vuelta al discurso de Morales, el presidente rechazó cualquier revanchismo contra las élites mestizas que gobernaron el país. «Solo queremos igualdad, dignidad y libertad para todos los bolivianos; el movimiento indígena originario jamás ha sometido a nadie, aunque hemos sido sometidos». El vicepresidente, Alvaro García Linera, señaló en su discurso que el proceso de refundación de Bolivia se debe al fracaso de la elite mestiza en los 181 años que han pasado desde la independencia del Estado español y los describió como «una revolución democrática, con votos y acuerdos, en lugar de balas y muertos». Junto a los miles de indígenas en representación de las 35 etnias de los nueve departamentros del país, asistieron al acto el vicepresidente de Cuba, Carlos Lage, la indígena guatemalteca y Premio Nobel de la Paz Rigoberta Menchú y el ex presidente chileno Eduardo Frei.
Tirón de orejas a varios de sus ministros
SUCRE En su informe a la Nación, Morales dio en la noche del sábado un tirón de orejas as varios ministros. «No es posible que, teniendo plata, no sepamos gastarla en beneficio de los bolivianos», señaló. «Algunos ministros se abocan a buscar plata teniendo plata». Puso como ejemplo al Ministerio de Vivienda, que tiene 56 millones de dólares en sus cuentas. "Hasta fin de año deben construir 10.000 viviendas con la plata que tienen, si no se hace rodarán cabezas», advirtió. Morales utilizó la ironía para criticar al vicepresidente lvaro García Linera. «En la Vicepresidencia el presupuesto era de 27 millones de dólares y ahora funciona con 7 millones, incluso para aportar a la belleza boliviana», dijo. García Linera asistió hace dos semanas al concurso de Miss Universo en EEUU para apoyar a la representante boliviana. Aseguró que se pagó el viaje de su propio bolsillo. Ya en general, Morales criticó que la corrupción está «institucionalizada» en instancias de la estructura del Estado y acusó a la oposición de torpedear la lucha contra esta lacra.
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