BAIONA
Convocadas por la Coordinadora contra las agresiones sexistas, varias decenas de manifestantes se concentraron ayer ante el ayuntamiento de Baiona para protestar por las violaciones de las que fueron víctimas dos jóvenes durante las recién acabadas fiestas. Entre los asistentes podía verse a varios concejales de la oposición, como la socialista Colette Capdevielle, la verde Martine Bisauta o el abertzale Xabi Larralde.Las manifestantes portaban una pancarta con el lema «Basta ya de violaciones» así como varios carteles contra las agresiones sexistas que el Colectivo de Mujeres había editado precisamente con motivo de las fiestas. Tras una media hora larga, una portavoz leyó un comunicado en euskara y francés en el que se exigía a los poderes públicos y a los organizadores de las fiestas «medidas de verdad para que nunca más se den casos semejantes».
Por la mañana, el alcalde Jean Grenet, acompañado por el teniente-alcalde responsable de la seguridad, Henri Labayle, y por el presidente de la Comisión de fiestas, Henri Lauqué, se declaró «entristecido y desolado por estos crímenes odiosos» acaecidos durante la madrugada del domingo y mostró su solidaridad con las dos víctimas, al tiempo que tildaba de «bestias» a los agresores: «Me siento afligido por Baiona y, por supuesto, por estas dos jóvenes que vinieron a nuestra ciudad para divertirse y vuelven a sus casas traumatizadas para el resto de su vida».
El alcalde de la capital labortana reconocía su impotencia para prevenir tales hechos que, matizaba, «han sucedido fuera del perímetro y también fuera del horario festivo».
Señaló, sin embargo, que analizarán nuevamente la posibilidad de poner en marcha medidas suplementarias como, por ejemplo, un teléfono de urgencia y un dispositivo de auxilio específico para estos casos y que insistirán en las habituales recomendaciones de ir siempre acompañadas, especialmente de noche, y de ayudar y mostrarse solidarios con las agredidas. Grenet se mostró abierto «a cualquier aportación que pueda ayudarnos a prevenir este tipo de situaciones».
Mientras, ayer mismo se hacían públicos otros dos casos de violencia machista acaecidos en Gasteiz e Iruñea. La Ertzaintza detuvo en Gasteiz a un joven de 19 años acusado de maltratar a su compañera e intentar agredir con una botella rota a un camarero que salió en defensa de la mujer, según informó el Departamento de Interior de Lakua. Los hechos ocurrieron hacia las tres de la madrugada de ayer y el agresor, identificado como Y.N., ha sido acusado de los delitos de amenazas y violencia de género. En Iruñea, por otra parte, la Policía española ha detenido por un delito de malos tratos y amenazas hacia su pareja a un vecino de la capital de 38 años a quien constaban otras cinco detenciones por hechos similares contra tres de sus compañeras anteriores.
Los agentes acudieron al domicilio del arrestado alertados por una llamada que explicaba que se estaba produciendo una agresión. La llamada la realizó la propia hermana del detenido a instancias de la víctima, que pudo comunicarse con ella para pedirle ayuda.