DONOSTIA
Francis Obikwelu ganó ayer la medalla de oro en la pista y defendió cuatro años después el título europeo de 100 metros que en Múnich consiguió con retraso, después de que el británico Dwain Chambers fuera desposeído del oro tras dar positivo por THG, la hormona sintética fabricada en los laboratorios Balco. Obikwelu que en el anterior Europeo celebró la medalla de plata con 10.06, un año después reconvertida en oro en los despachos bajó ayer en el estadio Ullevi de los diez segundos (9.99), consiguiendo el mejor registro en la historia de los 100 metros del certamen continental para cumplir los pronósticos del favorito ante un Chambers abrumado, que terminó séptimo después de retomar los competiciones oficiales tras cumplir los reglamentarios dos años de sanción.
Una salida falsa del polaco Kuc puso todavía más en guardia a los invitados a la final del hectómetro. Obikwelu salió tan mal como acostumbra, pero remontó a tiempo de colgarse el oro superando con creces al ruso Yepishin y al esloveno Osovnikar en la lucha por las medallas. Tampoco Marc Lewis-Francis pudo arreglar el descalabro británico en la final.
El campeón, un nigeriano con pasaporte portugués que reside en Madrid, tiene 27 años pero lleva una década frecuentando la alta competición después de ser rescatado para el mundo del atletismo. Es el actual subcampeón olímpico y el recordman europeo con 9.86. Con el coplusmarquista Justin Gatlin viviendo días turbulentos tras ser acusado de dopaje, Obikwelu quiere ser el hombre que rete a Asafa Powell y sus 9.77.
Antes tiene otras prioridades. Desde hoy buscará el doblete en los 200, una disciplina que se le da mejor porque tiene más metros para recuperar sus carencias de salida. En Múnich’2002 fue plata, también por detrás de un hombre polémico, el griego Kenteris.
Llovía ayer en Goteborg durante las primeras horas de la jornada vespertina, aunque las gotas cesaran a lo largo de la tarde. En la pista encharcada, Orkatz Beitia se preparaba para la carrera más importante de su vida compartiendo semifinal con el hombre que un rato después se proclamaría campeón:Obikwelu. El primer vasco que ha accedido a esta fase de los 100 metros en un Europeo terminó octavo con 10.52, lejos de su récord vasco de 10.34, pero satisfecho de su actuación. Era el momento de disfrutar de haber avanzado hasta la anteúltima prueba y de enterrar la decepción de hace cuatro años en Múnich donde cayó a las primeras de cambio.
El atleta del Bidezabal reconoció cierto cansancio porque la víspera vivió las eliminatorias como dos finales. «Lo mejor ha sido que llegué en el número 25 del ranking y he conseguido meterme entre los dieciséis mejores, así que estoy contento». Al ondarrutarra le queda el relevo.
La favorita y la leyenda
En las eliminatorias femeninas dominó Kim Gevaert y encandiló Merlene Ottey. La belga, subcampeona hace cuatro años en Múnich’2002 en 100 y 200 metros, pretende escalar ese peldaño imprescindible después de liderar el ranking continental. Ottey, la jamaicana más laureada, con pasaporte esloveno desde hace cuatro años, a sus 46 corrió ante rivales que podrían ser sus hijas y se metió en semifinales.Carolina Kluft disfruta en casa
Carolina Kluft revalidó su título europeo de heptatlón y
de paso consiguió su decimosexto título consecutivo entre los que se incluyen
dos joyas mundiales París 2003 y Helsinki 2005 y los Juegos Olímpicos
de Atenas 2004. Cinco años invicta, celebró su nuevo éxito en la combinada descalza y envuelta en la bandera sueca. Ahora le queda la longitud, en la que tampoco coincidirá con Eunice Barber, que también ha renunciado por problemas en el muslo izquierdo -
