GARA
BERLIN
Jan Ullrich, relacionado con la presunta red de dopaje de la “Operación Puerto”, ha aceptado el despido del equipo T-Mobile y con ello ha renunciado a una indemnización millonaria por abandonar dicho conjunto.
El semanario “Der Spiegel” revela que el profesional germano «ha aceptado inesperadamente el despido anunciado el pasado 20 de julio por el equipo T-Mobile», lo que supone la pérdida de todo derecho a reclamar algún tipo de indemnización por abandonar el conjunto germano.
Ullrich se ha visto perjudicado por unas declaraciones realizadas por su mánager, Wolfgang Strohband. «Jan no volverá con seguridad a subirse a un sillín para el T-Mobile. Ese capítulo está definitivamente cerrado para nosotros», dijo, y minó así toda base para plantear exigencias financieras a T-Mobile, ya que el corredor debía mostrarse dispuesto a correr al servicio de dicho equipo en cualquier momento, toda vez que su contrato no expira hasta finales de este año.
“Der Spiegel” asegura que los representantes jurídicos de Ullrich, con un contrato anual de 2,5 millones de euros, y los abogados de la empresa de telefonía móvil habían incluso iniciado negociaciones sobre la cuantía de una posible indemnización.
Actuación de la fiscalía
La fiscalía de Bonn ha abierto sumario contra el propio Ullrich y Sevilla, así como contra su preparador Pavenage, por presunta estafa en perjuicio del conjunto T-Mobile.
La investigación abierta tiene relación con las acusaciones de dopaje contra los dos profesionales deportivos. La acción de la fiscalía se basa en una denuncia presentada por la ex atleta retirada y ahora jurista Britta Bannenberg, quien exige que «el deporte en Alemania se mantenga limpio».
