OSLO
Los cuadros de Edvard Munch “El Grito” y “La Madonna”, robados en agosto de 2004 y recuperados el jueves por la Policía noruega, están dañados, por lo que no se expondrán al público hasta dentro de varios meses, según informó ayer Ingebjorg Ydstie, directora en funciones del Museo Munch.“La Madonna” tiene dos agujeros en la parte inferior de unos 2,6 centímetros. “El Grito” tiene un borde aplastado, además de varios agrietamientos.
Los cuadros habrían sido hallados en Moss, al sur de Oslo, aunque se desconoce el lugar exacto.
La pista de Toska
La prensa noruega escribía ayer que el atracador David Toska, habría proporcionado información sobre el paradero de los cuadros a cambio de una reducción de la condena que cumple por otro delito.
Toska es el responsable del mayor robo cometido en Noruega, en abril de 2004, en el que varias personas se llevaron 57 millones de coronas (unos 7 millones euros) de una central de reparto de la compañía NOKAS. Toska, quien también podría ser el organizador del robo del Museo Munch, habría cooperado con la Policía en un intento por obtener una condena más suave, un aumento de las visitas de su novia en prisión y una mejora de la situación carcelaria de un amigo.
Numerosos indicios conectan los dos robos. La Policía halló en el domicilio de uno de los condenados por el robo del Munch billetes que se cree provienen de ese atraco. Los guantes utilizados en ambos casos fueron los mismos y un testigo declaró que el robo de Munch fue una maniobra para despistar a la Policía que investigaba el caso NOKAS.
Toska fue arrestado en Málaga en abril de 2005 y condenado en marzo pasado por un tribunal noruego a 19 años de prisión.