La Delegación en Iruñea niega que el cuartel de Elizondo fuera atacado
IRUÑEA
Como ocurrió tras el incendio de una ferretería en Barañain, en Nafarroa vuelve a surgir la polémica en torno a un supuesto ataque de kale borroka. La Delegación del Gobierno español en Iruñea ha descartado cualquier motivación política en el supuesto impacto de cohetes en la fachada del cuartel de la Guardia Civil en Elizondo, de los que dio cuenta el sindicato denominado Unión de Guardias Civiles (UGC).
Según afirma éste, el pasado lunes a las 23.00 al menos un artefacto se estrelló contra el edificio. UGC afirma «tener claro que se trata de un nuevo ataque de kale borroka» y añade que «no es la primera vez que se producen estos hechos en esta localidad, incluidos intentos de linchamiento e incluso ataques a sus propiedades particulares».
Para la Delegación, por contra, los cohetes fueron lanzados por miembros de una peña de aficionados del Fútbol Club Barcelona para festejar la victoria de su equipo en el partido de Liga contra el Celta. Admite únicamente que «uno de los palos de estos artefactos cayó en las cercanías del acuartelamiento». Y, en consecuencia, indica que no se dio cuenta públicamente de este hecho porque se considera que fue una cuestión completamente accidental, sin relación con kale borroka.
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