DONOSTIA
«Cantabria infinita», reza el eslogan de promoción turística del territorio que ayer acaparó el protagonismo en La Concha. Y es que los tres clubes cántabros presentes en la cita, Castro, Astillero y Pedreña, estarán el próximo domingo en la lucha por la bandera más importante de la temporada. Orio será el único representante vasco de la tanda de honor, pero sus opciones de título son prácticamente nulas. Zarautz, Zumaia, Cabo da Cruz y Donostia Arraun Lagunak, por su parte, se encargarán de inaugurar la regata el próximo día 10.La Marinera dio ayer un recital. Los dirigidos por José Luis Korta ya habían avisado con anterioridad, imponiéndose en la última regata de la Liga San Miguel y en la clasificatoria del pasado jueves. Ayer, fueron mucho más allá y dieron un paso de gigante para hacerse con el triunfo final. Korta alineó por primera vez en la temporada a su tripulación de gala y ésta no falló.
Astillero, Zarautz y Cabo da Cruz eran sus rivales de tanda, pero sólo la San José XIV fue capaz de hacerle frente, pese a que al final cedió seis segundos y medio. La Enbata, por su parte, perdió algo más de medio minuto en la baliza de llegada, mientras que la embarcación gallega cedió más de 40 segundos. Pedreña, el más rápido de la primera tanda, necesitó diez segundos más que los castreños para completar el recorrido, pero todavía tiene posibilidades de hacerse con la victoria final. Si la mar, ayer completamente en calma, se enfurece, los de Joseba Fernández pueden tener sus opciones.
La Marinera, como un rayo
Como se preveía, fue una de las traineras de la segunda tanda la que mejor tiempo realizó. La Marinera partió a toda velocidad en busca de la única ciaboga de la regata. Su ritmo inicial de 59 paladas así lo atestigua. Astillero y Cabo, por su parte, comenzaron a 52 paladas, con Zarautz a 48. Las dos embarcaciones cántabras se mantuvieron prácticamente a la par hasta mediado el largo de ida. Zarautz se mantenía firme y apenas cedía una trainera, mientras que Cabo perdía ya siete segundos. A falta de 1.000 metros para la ciaboga, La Marinera tomó la delantera y realizó la primera maniobra con dos segundos y medio de renta sobre la San José XIV. La Enbata se dejó 13 segundos, cinco menos que el tiempo que necesitó Cabo para completar el primer largo.
En popare, los de José Luis Korta fueron aún mejor, aumentando su renta metro a metro. Poco después de tomar la ciaboga, la ventaja de los castreños aumentó hasta los cuatro segundos. Esa renta no se movió prácticamente hasta el final de la prueba, cuando La Marinera apretó y, mediante unas cuantas series consecutivas, incrementó de cuatro segundos a siete su renta.
Al final, en la baliza de llegada, los castreños aventajaron a Astillero en seis segundos y medio, una diferencia que no es definitiva cara al próximo domingo, pero sí que otorga el favoritismo a los colorados sobre los azules.
Zarautz fue el tercero más rápido en la tanda y, por un momento y a la espera de los tiempos oficiales, el cuarto mejor en el cómputo global, pero el videofinish demostró que su tiempo había sido apenas diez centésimas peor que el de Orio en la tanda inaugural, por lo que el domingo no estará en esa tanda de honor. Los dirigidos por José Ramón Mendizabal, pese a todo, cuajaron una gran actuación. Se mantuvieron cerca de Castro y Astillero durante gran parte del primer largo, pero al final terminaron acusando el ritmo cabecero.
Cabo da Cruz cerró la tanda, a 42 segundos. Los gallegos bogarán el domingo en la primera tanda.
Pedreña domina la primera
Si en la segunda tanda el dominio fue cántabro, algo similar ocurrió en la primera, con Pedreña comoprincipal protagonista. La María que dirige el pasaitarra Joseba Fernández completó una gran labor, dominando de principio a fin la tanda y marcando un gran tiempo en la baliza de llegada. Diez segundos de desvantaja son muchos, pero los pedreñeros podrían dar la sorpresa, especialmente con mala mar. Orio fue el segundo mejor de la tanda. La San Nikolas arrancó fuerte y fue con una mínima ventaja sobre Pedreña hasta mediado el primer largo, instante en el que se vio superado. A partir de ahí, los cántabros se crecieron y los dirigidos por Joxean Olaskoaga Aizperro fueron cediendo terreno, hasta los 21 segundos que perdieron en la baliza de llegada.
Zumaia, cerca de Orio durante el primer largo, terminó finalmente a 31 segundos, con Donostia Arraun Lagunak cerrando la tanda, a minuto y tres segundos.