Los ataques en Afganistán continúan cinco años después
KABUL
El movimiento talibán volvió ayer a golpear a los aliados locales de las fuerzas extranjeras con un ataque suicida que causó la muerte de cinco personas, además del kamikaze, durante el entierro del gobernador de Paktia, Abdul Hakim Taniwal, muerto el domingo en otro atentado similar.
Según confirmó la Policía local de la provincia de Khost, un hombre vestido con uniforme de la policía hizo detonar los explosivos que tenía alrededor de su cuerpo durante el oficio funerario. La explosión mató a cuatro policías y el jefe del Consejo local de Khost.
Entretanto, las fuerzas de ocupación anunciaron ayer la muerte de dos de sus soldados, sin precisar la nacionalidad. Además, elevaron a a 500 los milicianos afganos muertos tras asegurar que el domingo habían abatido a 92 guerrilleros en el sur.
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