El vigente campeón, el Barcelona, parte como el rival a batir en la fase de grupos de la Liga de Campeones que echará hoy a andar con un amplio abanico de aspirantes, marcados todos ellos por grandes urgencias por hacerse con el título más importante de la temporada.

El holandés Frank Rijkaard aspira a repetir como entrenador los dos títulos consecutivos que consiguió como jugador en 1989 y 1990 con el Milan, último equipo que encadenó dos victorias en la máxima competición continental. El equipo azulgrana, que ha sido encuadrado en el grupo A, tiene motivos para asumir la condición de favorito; es un equipo hecho, con un estilo definido y se ha reforzado bien, aprovechando el escándalo que ha azotado a la Juventus, cuya ausencia en la máxima competición continental es la nota más destacada de la presente edición.

El vigente campeón ha reforzado su defensa con dos jugadores de la talla de Thuram y Zambrotta, que llegan del equipo turinés y ha cubierto la baja de Larsson, con la llegada de otro delantero nórdico como Gudjohnsen, procedente del Chelsea inglés.

Precisamente el equipo de Mourinho es, en principio, el principal rival de los culés en este primer grupo, sin olvidar a otro viejo conocido para los catalanes como el Werder Bremen. Es el Chelsea, curiosamente, el conjunto que acude más presionado a la Champions, porque después de dos temporadas en las que no ha tenido rival en la Premier, el portugués José Mourinho ya se ha quedado sin excusas ante Roman Abramovich, que ha contratado al ucraniano Andrei Shevchenko ­40 millones de euros­ del Milan y a Michael Ballack, que acababa contrato con el Bayern de Munich. De momento, las cosas no marchan como esperaba el portugués en la competición doméstica.

El mercado europeo esta temporada ha estado marcado claramente por el escándalo italiano y ha sido el Inter, el equipo referente en el grupo B, el que más parece haberse aprovechado de ello. El equipo de Roberto Mancini ha terminado siendo campeón por decreto y ascendido a la condición de aspirante al título continental, después de pescar en Turín al sueco Zlatan Ibrahimovic y al francés Patrick Vieira y de fichar al argentino Hernán Crespo. Un histórico venido a menos en Europa como el Bayern de Munich y dos equipos que quieren crecer en el continente como Sporting de Lisboa y Spartak de Moscú completan otro grupo en el que la clasificación será cara.

Pese a los buenos refuerzos del delantero holandés Kuijt o el chileno Mark González, el Liverpool ha comenzado la temporada con muchas dudas y el sábado sufrió una dolorosísima derrota al caer por 3-0 en el derbi ante el Everton. El equipo de Xabi Alonso tendrá en el PSV de Farfán y Kluivert a su principal rival, pero sin perder ojo a la ilusión de dos equipos que vuelven como el Galatasaray y el Girondins.

Del Horno ya toca balón

Otro que regresa tras un año de ausencia es el Valencia de Del Horno, que deberá esperar para poder debutar. El de Gallarta comenzó ayer a tocar balón en la ciudad deportiva de Paterna tras varios meses de trabajo en el gimnasio en solitario y comienza así la parte final de su recuperación. El equipo valenciano ha apostado por españolizar a su equipo con los fichajes de Morientes y Joaquín y, en teoría, tiene uno de los grupos más asequibles ante un Olympiakos que maravilló en la pretemporada, una Roma que está en la Champions de carambola y el siempre peligroso Shaktar Donest ucraniano.

Como siempre, el Real Madrid ha sido uno de los equipos que más favorecidos ha salido del sorteo, aunque se volverá a cruzar con un coco como el Olympique de Lyon, que este año aspira a que su buen juego tenga el premio de superar los cuartos. Al Bernabéu ha regresado el italiano Fabio Capello, que vuelve como principal aval para recuperar la senda del éxito, flanqueado por veteranos con experiencia como Diarra, Emerson o Cannavaro, que habla de sus intenciones. El Dínamo de Kiev y el emergente Steaua de Bucarest, buscarán aprovechar sus campos para tratar de dar la sorpresa.

Tras años de decepciones, tampoco tiene mucho margen de error el Manchester United, que tiene a Michael Carrick como principal atractivo y que ha comenzado muy fuerte en Inglaterra. Históricos como el Celtic de Glasgow o Benfica y la sorpresa del torneo, el Copenhague que eliminó al Ajax, completan su grupo.

El Arsenal, finalista el año pasado, no ha arrancado bien la Premier ­liga con más representantes­ pese a mantener a su estrella Henry y la contratación de Baptista. El Hamburgo, verdugo de Osasuna, Oporto y el reforzado CSKA de Moscú lucharán en teoría por el segundo billete del grupo.

El Milan, que salió a última hora del infierno, repescado por la justicia deportiva italiana y por la UEFA, tratará de aliviar su delicada situación en Europa. Carlos Ancelotti ha pensado en Oliveira como sustituto de Sheva. Sin embargo, hasta que se adapte a su nuevo club, Pippo Inzaghi, héroe en la fase previa ante el Estrella Roja, y Alberto Gilardino mantienen a flote al club. Los italianos parecen tenerlo fácil en un grupo que completan AEK de Atenas, Anderlecht y Lille.-