IRUÑEA
Como cada 18 de setiembre, Bardenas celebrará hoy la tradicional entrada de rebaños de ovejas procedentes de la valles de Erronkari y Zaraitzu, a pesar de la falta de agua y alimentos que se vive este año. Fue el rey Juan de Labrit el que en 1499 estableció que todos los rebaños debían salir en mayo y no regresarían antes de San Miguel, el 29 de setiembre.
De esta forma, en época estival los rebaños parten hacia los pastos pirenaicos y en otoño regresan a Bardenas, donde han llegado a invernar cerca de 100.000 cabezas de ganado lanar.
Este año se calcula que serán alrededor de 80.000 las que se reúnan en Bardenas, pero las escasas lluvias del verano, que han hecho secarse algunas balsas, las cosechas pobres y el poco pasto que hay en la zona hacen que el sector se muestre preocupado.
Recurrir al pienso
De hecho, se anuncia que será necesario recurrir al pienso tras un periodo que se calcula breve en el que habrá alimento gracias a las bandas de protección sin cosechar. Coincidiendo con la entrada de estos rebaños de ovejas trashumantes, el Consejo Regulador del Cordero de Nafarroa ha organizado dos degustaciones. Una tuvo lugar ayer, con cordero asado a la brasa en la localidad de Zarrakaztelu (Carcastillo) y otra se realizará hoy en El Paso, a base de filetes de cordero en bocadillo.
Las actividades festivas continuarán a lo largo de toda la jornada.