VIGO
Segunda victoria consecutiva de José Angel Ziganda, que aparta posibles fantasmas y endereza el irregular comienzo rojillo de la temporada, no tanto en cuanto a juego sino en lo que se refiere a resultados.El de Larraintzar se mostró satisfecho con la labor desarrollada por sus pupilos, especialmente por haber cumplido a la perfección lo ensayado a lo largo de la semana, en el sentido de disponer del esférico y suplantar al contrario a la hora de llevar la iniciativa del envite.
«Lo más destacable es que hemos defendido con balón ante un rival de gran entidad, al que no le hemos dejado estar cómodo en ningún momento. Estoy muy contento por el resultado pero, sobre todo, por cómo se ha desarrollado el encuentro», reconoció.
Al igual que hiciera a la finalización del choque contra el Nastic hace una semana, el míster rojillo ahondó en la necesidad de que el conjunto vaya ganando en confianza a base de marcadores favorables. «Necesitábamos un partido así para ganar en autoestima y jugar tal y como sabemos», dijo.
Este giro que se ha producido en el nivel de juego y eficacia de Osasuna, propulsado a partir del partido de ida de la Copa de la UEFA ante el Trabzonspor, casualidad o no, ha coincidido con la llegada de las rotaciones.
«Tenemos una plantilla muy igualada y compensada, por eso es mejor que salga uno nuevo que esté al cien por cien, que otro que esté jugando y no se encuentre a tope. Además, así todo el mundo sabe que tiene opciones y quiere estar en el once inicial», explicó el preparador osasunista.
Por hablar de algún pero, Ziganda señaló que el choque volvió a convertirse en un correcalles mediada la segunda parte, «algo que no nos interesa para nada», lo que propició las mejores ocasiones para el rival, «que ha sabido muy bien jugar en las ocasiones que ha tenido uno contra uno».
CELTA.
Fernando Vázquez no supo buscar soluciones a los problemas que le había planteado su homónimo rojillo sobre el césped. El técnico celtiña confió la dirección de su equipo al joven internacional Borja Oubiña, pero el pivote gallego no estuvo ayer a la altura de las circunstancias. Sus estrellas Baiano y Nené también estuvieron ausentes durante el encuentro.
OSASUNA. A Ziganda le salió bien su planteamiento para ganar en superioridad en la medular. Raúl García y Muñoz cortocircuitaron la salida de balón del Celta, mientras Nekounam le daba un plus de consistencia a la zaga rojilla. Además, Valdo se metió bien entre líneas y estuvo rápido y efectivo.