Batasuna pide una respuesta conjunta de la ciudadanía al TAV
Batasuna realizó ayer un «llamamiento especial» a todo Euskal Herria para que acuda a la manifestación contra el inicio de las obras del Tren de Alta Velocidad que tendrá lugar el próximo 8 de octubre en Legutio. Asimismo, también criticó la postura «hipócrita» de Ibarretxe, que dijeron apela a la participación ciudadana y luego niega la palabra.
DONOSTIA
La localidad alavesa de Legutio acogerá el próximo 8 de octubre una manifestación convocada por la plataforma AHT Gelditu Elkarlana con el objetivo de denunciar una vez más esta infraestructura y exigir la paralización de todo el proyecto. El mahaikide Joseba Alvarez y el miembro de Batasuna Eusebio Lasa comparecieron ayer en Donostia para hacer un «llamamiento especial» a la ciudadanía de Euskal Herria para que acuda a Legutio, a la «última manifestación importante» que se celebrará antes de que comiencen las obras de la Y vasca. Los portavoces de la formación abertzale señalaron que hay muchas razones para acudir a la movilización, entre las que citaron que «es un problema que atañe a todo Euskal Herria y que se trata de la mayor infraestructura jamás construida en el país». Por ello pidieron «una respuesta conjunta de todo Euskal Herria y todas las poblaciones afectadas». Este mismo acto también valdrá añadieron «para hacer frente a la imposición y la prepotencia de los gobiernos de Madrid y Gasteiz», ya que éstos «pretenden seguir adelante con su inconsciencia y su imposición sin impulsar un debate participativo sobre el mismo».
«Hipocresía» y «miedo»
Con estas dos palabras calificaron Alvarez y Lasa la actitud que Ibarretxe mantiene con respecto al TAV. Calificaron su comportamiento de «hipócrita», ya que a pesar de que en la reciente reunión mantenida con miembros de Eudel abogó por la participación de los ayuntamientos y los ciudadanos, tanto en el proceso político como a la hora de tomar decisiones, «y luego, en la práctica, hace lo contrario en lo que a infraestructuras gigantes como el TAV se refiere», denunciaron. Esto se debe, según los miembros de Batasuna, a que «tiene miedo a dar la palabra a los ciudadanos, los ayuntamientos y los agentes», ya que ello dejaría al descubierto que «se van a destinar cerca de 6.000 millones de euros para hacer negocio y no para arreglar los problemas de transporte de los ciudadanos», «que no hay un mínimo consenso social en torno a la obra», «que Euskal Herria necesita otro modelo de transporte» y que «la única alternativa es el tren social». El TAV sólo servirá, en palabras de Alvarez y Lasa, para «hipotecar el futuro de Euskal Herria y limitar el presupuesto para necesidades sociales».
|