Al excelentisimo señor Miguel Sanz
Día tras día nuestros derechos lingüísticos son vulnerados gracias a la política lingüística que su Gobierno mantiene. Usted aún tiene la poca vergüenza de decir que su gobierno continuará atendiendo los derechos de los y las vascoparlantes «con respeto y desde la libertad». Ante esto, le pido por favor, que deje de «atender» nuestros derechos ya que preferimos estar desatendidos a seguir recibiendo la «atención» que nos da hoy en día.Respecto a las declaraciones que realizó refiriéndose a una universidad bilingüe como una «mala universidad», aclararle que el idioma no es lo que da calidad a la enseñanza ni a las investigaciones, que es lo que usted mantiene. El responsable de esto, en todo caso, es el sistema educativo. ¿Cómo se entiende que la educación bilingüe en referencia al euskera y castellano la considere de mala calidad y, sin embargo, impulse una educación bilingüe de inglés y castellano como en el caso de las escuelas infantiles abiertas en la Rotxapea? En fin, creo que ya hemos malgastado tiempo suficiente en responder a sus declaraciones retrógradas e insulsas. Erlea Velerdas y Egoi Irisarri
Miembros de Ikasle Abertzaleak
75 años votando
Parece mentira, hace tan solo 75 años que las mujeres pueden votar en el estado español. Hay muchos que todavía se escandalizan cuando se dice que la mujer esta discriminada, apaleada en muchas ocasiones, con menor presencia institucional, pública, y no digamos en los órganos de dirección. Como si en esta democracia «de toda la vida», a la que muchos se apuntan ahora, no les hubiera costado conseguir este pequeño pero a la vez importante paso. Todavía quedan muchos que dar para llegar a esa igualdad que se merecen, pero en ese camino y en el de la paz y democracia para Euskal Herria hay muchas mujeres vascas que nos han dado un ejemplo con la plataforma Ahotsak y su documento. Ahora les toca también a los hombres ser tan audaces y valientes como ellas, que no nos cueste otros 75 años conseguir la libertad de este pueblo y que sus mujeres y hombres puedan decidirsu futuro. Animo y a seguir trabajando. Joxean Urkiola
- Donostia
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