DONOSTIA
Los dos delanteros de la Real que se encuentran de baja evolucionan de forma diferente de sus problemas. Morten Skoubo no consigue superar las molestias que padece en el tendón de aquiles derecho y los médicos realistas han decidido que complete el tratamiento con un trabajo intensivo en el centro especial de recuperación de lesionados de Capbreton a partir de mañana.El danés es el que tiene los dolores y hay que respetarle, pero pocos entienden que en la situación actual del club y tras los informes médicos que confirman que no está lesionado y le aconsejan que fuerce para poder jugar pese a sus molestias, no termine de hacerlo. Una actitud que contrasta con la que Kovacevic mantuvo al jugar media temporada con un problema en esa zona más grave que le obligó a pasar por el quirófano. El serbio evoluciona conforme lo previsto del arrancamiento de tendones en el adductor izquierdo. Hoy trabajará en el gimnasio y tiene previsto comenzar a realizar carrera continua, aunque nunca podrá jugar antes de la próxima salida al Calderón.
También sigue la recuperación de su lesión Stevanovic y Rossato se retiró del entrenamiento con un bloqueo lumbar que precisó de una visita para que el doctor Sagasti le desbloqueara. La nota más destacada de la sesión de ayer, que comenzó con una sesión de vídeo, fue la larga charla que mantuvo Lotina con Rivas en el césped para corregir errores.
Los blanquiazules descansarán hoy y mañana comenzarán a preparar con una doble sesión en Zubieta el partido del domingo a las cinco contra el Betis de Irureta. Una sesión en la que comenzará a trabajar con sus nuevos compañeros Jesuli, que estuvo ayer de permiso en Sevilla. La Real ya ha presentado los informes necesarios para que se pueda dar de baja a Igor Jauregi por su enfermedad, una comisión delegada de la LFP tiene previsto analizar el caso esta semana y lo normal es que se acepte la solicitud y Jesuli pueda recibir el alta federativa y esté a disposición de Lotina para el partido del domingo en Anoeta.