- Osasuna -
«Tengo muy claro que nunca voy a ser una carga», asegura Ziganda
·El técnico se siente respaldado por la directiva, pero reconoce que «el crédito se acaba»
IRUÑEA La afición de Osasuna pagó el domingo buena parte de su desilusión por la derrota ante el Real Madrid y, en general, por la marcha del equipo con José Angel Ziganda, que en la primera parte tuvo que escuchar el temido «Cuco vete ya».Lo cierto es que el técnico se siente respaldado por la directiva y confía en la reacción del equipo, por lo que prefiere «no pensar» en la posibilidad de su cese, pero también asegura que no le dolerán prendas en hacer las maletas si en algún momento considera que su marcha puede beneficiar al equipo. «Los directivos son los primeros en animar, se les ve superconvencidos de todo aseguró, pero sé dónde me muevo y tengo muy claro que nunca voy a ser una carga. Tenemos que aceptar las críticas, hacer examen de conciencia y corregir, porque el crédito se nos acaba a todos», reconoció. En la misma línea, Ziganda adelantó que si ve que los jugadores «no terminan de arrancar o la directiva duda», él será «el primero en... Me dolería, pero soy el primero en asumir, y así se lo he dicho al vestuario, que si alguien falta el mes que viene, seré yo. Claro que todavía no quiero pensar en éso». Respecto a los gritos de «Cuco vete ya» que tuvo que escuchar el domingo, el técnico aseguró haber «meditado sobre éso y, si bien a nivel personal es duro, está claro que el máximo responsable soy yo. Qué voy a comentar de una afición que no ve ganar y a la que ofrecemos un fútbol no muy brillante». Y es que Ziganda es consciente de que «el gran problema es que no ganamos. Tenemos que recuperar firmeza, ser más compactos y mucho más duros. Con esos cimientos la gente cogerá confianza, jugará mejor y estará más acertada", aventuró. Una reacción en la que, lógicamente, confía, aunque reconoce que ésta ya tendría que haberse producido. «La hora de despertar ha llegado hace mucho tiempo admitió. No podemos engañarnos viendo que hay equipos que están peor, porque tenemos pocos puntos y, aunque aún hay tiempo para que el año sea bueno, el crédito se nos acaba».
Delporte se disculpó por lo sucedido el domingo
IRUÑEA No fue José Angel Ziganda el único en pagar las iras de la afición rojilla. Ludovic Delporte se retiró entre abucheos, tras un protagonizar un enfrentamiento con Milosevic, Corrales y Jon Andoni Goikoetxea que ayer quiso explicar y por el que se disculpó. «Tengo un carácter muy fuerte, estaba nervioso y tras dos o tres jugadas en las que hablé con Savo y Quique, éste me contestó explicó. Después, Andoni me llamó, pero con el ruido no oí bien. No sabía qué me decía, pensaba que era algo sobre una acción del partido, así que me acerqué y se refirió al pique con Corrales. Dijo que no me enfadara, que animara y lo único que hice fue contestar, a lo mejor, eso sí, de una manera fuerte», concedió. Por éso cree que se equivocó «en las formas. A lo mejor la afición pensó que me encaré con Andoni, pero ni le insulté, ni fui a por él, ni insulté a la grada. Hoy he leído cosas increíbles, pero fue así. De hecho Savo y Quique me han asegurado que no se han molestado», explicó. No acabaron ahí los problemas de Delporte, pues a la salida del campo tuvo una trifulca doble con un aficionado que «vino a por mí y me dijo cosas que a nadie le gusta escuchar. No le dije nada, me siguió, y vinieron dos o tres que me llevaron a la grada para que tranquilizara prosiguió. Pero yo volví, porque estaban mi mujer y mi hija, y ese tío seguía allí. Siguió insultándome y, entonces sí, tuvimos un problema. Fue algo puntual, porque la mayoría de la gente me trató muy bien a la salida del estadio y eso es lo más importante», destacó.
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