MADRID
El escritor catalán Javier García Sánchez retrata la fascinación y la soledad con la que los alpinistas afrontan las escaladas a las más altas montañas en “K2”, su última novela con la que también intenta deshacer el tópico de que el deporte «no pueda tener cabida en la vida literaria». En esta mirada a la naturaleza humana, García Sánchez destripa algunos de los misterios que guarda el K2, la segunda montaña más alta del mundo que sólo ha sido encumbrada -hasta 2004- por 256 personas y que, a día de hoy, ha dejado más de cincuenta víctimas entre sus 8.611 metros de altitud.
Sin embargo, para García Sánchez su nueva obra «no es un libro más sobre el K2», sino que con ella ha intentado escribir «una novela absoluta sobre la montaña», explicó ayer el novelista catalán durante la presentación del libro en Madrid.
«Esta es una novela sobre alpinismo, pero no es literatura de montaña al uso. El libro es, sobre todo, un homenaje a quienes han perdido su vida en cumbres como la del K2, la más bella y cruel de todas las montañas», subrayó el autor de obras como “Ella, Drácula”, “La dama del Viento Sur” o “El mecanógrafo”.
En “K2”, el escritor retrata las inquietudes que un alpinista ya retirado siente por el mundo de la escalada, «un personaje que ha descubierto que, una vez deja atrás la obsesión y las heridas mentales que le ha provocado la montaña, los verdaderos ocho miles están en la vida diaria, en el amor y en la amistad».
La vida del protagonista cambió cuando conoció a su mujer, Julia, y ahora, años después, trata de averiguar, a través de sus recuerdos, las causas de la tragedia ocurrida en el K2 en 1993, fecha en la que decenas de personas pertenecientes a una expedición internacional perdieron la vida. La viva descripción de la tensión que caracterizan estos ascensos es otra de las claves de este libro, en el que su autor evoca a escaladores tan insignes como Reinhold Messner o Hermann Bull para tratar de revelar qué fascina tanto a los alpinistas para jugarse la vida a más ocho mil metros de altura.
