A la hora de resolver un conflicto personal, social o político hay que analizarlos de manera profunda, algo así como diseccionarlo para poder determinar, no sólo el origen y las consecuencias, sino sobre todo para comenzar a buscar soluciones, por ello es muy importante que participen todas las partes implicadas en el problema o conflicto, porque quienes no participen se verán con imposiciones de acuerdos en lo que ellos no opinaron, ni acordaron y esto puede provocar mayores roces.

El análisis debe ser intenso y no de manera superficial, no quedarse en lo que se ve, sino llegar a lo que muchos intentan que no veamos. Por ejemplo, cuando hablamos del 11-M y 11-S, no deberíamos limitarnos en ver terroristas y víctimas, sino también a los responsables de que un pueblo quiera vengar la muerte de muchos inocentes que murieron por una invasión y una guerra que no pidieron ni desearon nunca, más tarde mueren otros tantos inocentes que incluso habían salido a las calles para pedir que no hubiera guerra, claramente vemos que hay víctimas inocentes en ambos lados, por tanto ¿quiénes son los mayores responsables de la guerra y de los atentados, de los cientos de muertos de uno y otro país?

Esto mismo pasa en el País Vasco, existe un conflicto social y político, y me pregunto ¿quién es el mayor responsable de que exista ETA, atentados y víctimas, de que haya presos políticos y torturados, de que haya suicidios en las cárceles, de que haya detenciones y juicios masivos, de que exista dolor por ambos lados, de que los vascos estén confundidos y divididos, de que ahora que hay tregua y disposición de dialogar, se pongan todos los impedimentos y dificultades posibles para que puedan encontrarse y dialogar todas las partes y con sobrado derecho, los vascos y las partes más implicadas en el conflicto, quiénes son realmente los responsables de que no haya diálogo y acuerdo, quiénes son los que insisten en atemorizar, dividir y confundir a los vascos? Si nos atrevemos a analizar de manera intensa y honesta el conflicto y sus causas, encontraríamos muchos otros responsables que no dan la cara y que son los más interesados en no respetar la opinión y la decisión del pueblo vasco y quizá los más intere- sados en que el conflicto no termine, ¿quiénes son estos responsables?

No soy experta en política, ni mucho menos soy política; soy una inmigrante residente con hijos vascos, que estoy deseosa de que mis hijos disfruten su cultura y su idioma en un país sin conflictos, de que puedan sentirse vascos sin temores ni complejos, sin prejuicios ni castigos, de que se sientas felices y no culpables de ser vascos. -