JARTUM
Al menos 30 civiles murieron ayer en un ataque ocurrido en el oeste de Darfur, según informó la ONU. Los milicianos utilizaron lanzagranadas para atacar un convoy civil de camiones que transportaba medicinas y material de ayuda humanitaria entre las localidades de El Geneina y Sirba. Un cooperante aseguró que los atacantes pertenecían a las milicias pro-gubernamentales árabes janjaweed y que atacaron el convoy y después ejecutaron a los supervivientes. La ONU explicó en un comunicado que los atacantes dispararon a los miembros del convoy, mientras que a otros les prendieron fuego y ardieron hasta morir.
Tras el recrudecimiento de la violencia en esta región del oeste de Sudán, el jefe de Gobierno y los ministros del gabinete de la región autónoma del Norte de Darfur anunciaron su dimisión, según declaró Mini Arkoi Minawi, asesor del presidente sudanés. Minawi es el líder de la principal facción del rebelde Movimiento de Liberación de Sudán (MLS), y en mayo pasado firmó un acuerdo de paz con el Gobierno de Jartum, según el cual fue nombrado asesor del presidente del país, Omar Hasan al Bashir.
200.000 muertos en tres años
El conflicto de Darfur estalló en febrero 2003 cuando el MLS se levantó en armas, junto a otros grupos, para protestar contra la pobreza y marginación de la región. Unas 200.000 personas han muerto desde entonces y 2 millones más se han visto forzadas a abandonar sus hogares y a refugiarse en campos de refugiados en Sudán y Chad, en lo que, según la ONU, constituye uno de los peores desastres humanos de este siglo.