Más de 10.000. Esa fue la cifra de votos donostiarras que en mayo de 2003 acabaron en el cubo de los nulos. Su opción política fue la plataforma Baga Boga, declarada ilegal por los tribunales españoles. Durante estos cuatro años, esas más de 10.000 personas han seguido pagando sus impuestos, pero su voz ha sido ignorada por el Consistorio. No han tenido quien les represente cuando se han tomado decisiones en temas de tanto calado en la capital guipuzcoana como la vivienda, la incineración de residuos, la política lingüísticaŠ

PNV, PP y EB se repartieron las tres concejalías de la candidatura independentista. Pero la exclusión en la institución municipal no ha impedido que Baga Boga haya estado presente en el día a día. La legislatura se acaba. En mayo de 2007 habrá elecciones, y ese importante sector social estará presente.

Ese fue uno de los compromisos adquiridos ayer en un acto celebrado en el Palacio Miramar de Donostia, que dio el banderazo de salida a la conformación de «una alternativa abertzale y de izquierdas para Donostia».

Un cartel con el lema «Indarrak biltzeko garaia. Orain, ezker abertzalea» presidió esta presentación en sociedad. Josetxo Ibazeta ­ex concejal de EuskalHerritarrok y actualmente electo de Baga Boga­, subrayó que los últimos años «han sido muy duros, sin derechos civiles ni políticos. Pero hemos aprendido mucho, hemos avanzado».

La opinion de la ciudadania

Fruto de esa experiencia es el documento que se ha elaborado durante los últimos meses con un diagnóstico de la ciudad. Un texto que está abierto a las aportaciones de la ciudadanía para que ésta opine sobre qué Donostia quiere, y que será la base del programa electoral. «Porque ­subrayó Ibazeta­ la izquierda abertzale es una alternativa real a este modelo».

En su alocución, el edil tuvo un recuerdo para quienes han fallecido en estos últimos años, en especial «para quienes, como dice la canción, han muerto ‘en la linea del frente’».

Tampoco se olvidó de los presos y exiliados, y aseguró que «lo primero que harán los electos será colgar de la balconada de su despacho la banderola de “Euskalpresoak, EuskalHerrira”. Nos gustaría no tener que hacerlo o que estuviera el mínimo tiempo posible», apostilló.

Josetxo Ibazeta finalizó su presentación dando paso a un vídeo en el que se repasó la gestión de Odón Elorza. Un trabajo en el que se presentó un balance negativo de estos cuatro años en aspectos como participación ciudadana, vivienda, mujer, socio-economía, tercera edad, cultura, deporte, juventud, fiestasŠ

A renglón seguido tomó el micrófono Joseba Alvarez, ex concejal independentista en la capital guipuzcoana y que actualmente es mahaikide de Batasuna. Sus primeras palabras fueron para pedir un aplauso para el allí presente Félix Soto, histórico edil de HB que continúa al pie del cañon.

Alvarez destacó que las elecciones del próximo mayo supondrán el inicio de un ciclo electoral en EuskalHerria que culminará con las autonómicas de 2009, por lo cual «está en juego la representación política hasta 2013». En este contexto, se preguntó «si alguien piensa que el proceso podrá avanzar si en las instituciones no están representadas todas la expresiones políticas».

El mahaikide subrayó el «importante papel» de las instituciones: «Si se pone en marcha el proceso, deberán proteger e implementar el acuerdo político que se logre, canalizar la participación de la ciudadanía y ejercer la representación en el exterior». Alvarez señaló que existe un problema llamado Ley de Partidos, creada por el PP con la ayuda del PSOE.

«Ellos crearon el problema, levantaron un muro. A ellos les toca solucionarlo. Mucha gente, ajena a la izquierda abertzale, lo está diciendo. Lo pueden hacer cumpliendo su propia legalidad, porque Rodríguez Zapatero tiene las mayorías necesarias», indicó.

«La izquierda abertzale estará en las elecciones, pero será para hacer política en las instituciones. Nuestro objetivo es estar para defender el proceso y un proyecto de izquierdas para este país. Ese es el mayor reto para los próximos meses», sentenció.

Tambien en bolibar

En el municipio vizcaino de Bolivar, al igual que en Donostia y el resto de localidades vascas, han puesto en marcha su propio proceso de elaboración de un programa de cara a los próximos comicios.

Una iniciativa que llega tras una legislatura en la que, según denunciaron ayer, el PNV «ha gestionado el apartheid político», tomando las decisiones «como si el ayuntamiento fuera su empresa privada» y conviertiendo al castellano en el idioma referencial. -