La zona euro retoma «la senda de la recuperación económica», según la OCDE
La OCDE confirmó ayer que la zona euro inicia una senda de «recuperación económica». Todavía no hay los suficientes datos para asegurar que esa tendencia es sólida, por lo que el organismo internacional reclama reformas estructurales que afectarán, sobre todo, a los salarios de los trabajadores y suponen una mayor flexibilidad de la actividad laboral y económica, recetas que tienen que ver con el neoliberalismo económico. Acepta la política monetaria del BCE para «contener la inflación» y reconoce que «hay divergencias muy fuertes» entre crecimiento e inflación.
BILBO
El estudio económico de la zona euro para 2007, que presentó ayer la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), evalúa de forma positiva el impacto que la moneda única ha tenido en el mercado de la Unión Europea y manifiesta su apoyo a la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE). El trabajo confirma que se ha entrado en «una fase de recuperación», aunque opina que el optimismo debe ser entendido con «una cierta prudencia» debido a que es «frágil» y «necesita» de nuevas reformas estructurales, sobre todo, en el mercado de trabajo y los salarios. También llama la atención a los gobiernos para que saneen las finanzas públicas para poder soportar el gasto de las futuras pensiones. Los datos de crecimiento de la zona euro, según la OCDE, anticipan que el año pasado se ha cerrado con un crecimiento del 2,6%; para el actual se prevé un aumento del 2,2%; y un incremento del 2,3% para 2008. En cambio, la inflación en la zona euro se reducirá del 2,2% al 1,8% en ese mismo período, según esas previsiones. «Algunas señales alentadoras hacen pensar que la reanudación de la recuperación económica se extiende de forma progresiva, también en el consumo de los hogares», sostiene el «Estudio económico de la zona euro, 2007». En general, la OCDE considera que los cinco años de Unión Monetaria han puesto de manifiesto que «las economías menos flexibles pueden encontrar dificultades» y que «no están sacando un provecho de la moneda única», aunque ha permitido incrementar entre un 5% y un 15% «los intercambios comerciales».
Rigideces estructurales
La OCDEjustifica la afirmación señalando que «las rigideces estructurales tienden a frenar el crecimiento; a dar a la inflación un carácter más persistente y a reducir la capacidad de absorción de la economía en caso de crisis». Las recetas que propone para lograr «la mayor flexibilidad» y «una mayor integración de las economías» de los trece estados que conforman la zona euro Alemania, Austria, Bélgica, Estado español, Finlandia, Estado francés, Grecia, Holanda, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Portugal y Eslovenia, se basan en tres actuaciones: «reducir las rigideces del mercado laboral para permitir a las economías hacer frente más eficazmente al cambio de ciclo». En este caso, propone «aumentar la flexibilidad de los salarios» y ligarlos «a la productividad». En segundo lugar, reclama «estimular la competencia» en el sector «protegido» de Servicios «con el fin de reducir la inercia de la inflación y reducir las presiones sobre la política monetaria». En tercer lugar, considera necesario «proseguir en la integración y en el desarrollo de los mercados financieros».El informe de la OCDE acepta la política monetaria que mantiene el Banco Central Europeo (BCE) porque «ha afianzado las anticipaciones de inflación sobre el objetivo de estabilizar los precios y, eso ha ocurrido, a pesar de la elevación de los precios de la energía». Por lo que añade que «los precios más altos de la energía empiezan a causar subidas de otros precios a medida que se dejan sentir en la cadena de producción. Aunque hay pocos indicios de efectos secundarios en los salarios, varias medidas de inflación subyacente y los precios de producción señalan una presión inflacionista potencial a lo largo de uno o quizás dos años», precisa el informe. En el estudio se reconoce que hay fuertes diferencias entre el crecimiento económico y la inflación en la zona euro. De hecho, los datos de la OCDE muestran que en el Estado español el PIB real por habitante es 1,2 puntos inferior a la inflación armonizada, lo que supone una pérdida económica para los bolsillos de los trabajadores. Por otro lado, el organismo internacional reclama a los gobiernos de la zona euro que se encuentran en un momento positivo para «rectificar la política presupuestaria» a fin de «equilibrar las cuentas y reducir la deuda» con el objetivo de «garantizar el futuro de los sistemas de pensiones». Entre 2005 y 2050 el Estado español destinará una media del 7% del PIB a pagar pensiones.
Reunión en la UE para tratar sobre el trabajo de calidad
J. BASTERRA
BILBO Entre el 18 y el 20 de enero se celebrará en Berlín una reunión informal de los ministros de Empleo y Asuntos Sociales de la Unión Europea para analizar los pasos que se deben de dar para mejorar las condiciones de vida y de trabajo en el mercado laboral europeo. Según explicó la presidencia alemana, la reunión informal permitirá conocer de primera mano las posiciones de los ministros en torno a ese tema, sobre todo, teniendo en cuenta que se deberá adoptar el libro verde sobre el derecho al trabajo en el primer semestre de este año. En principio, se tratará de reducir la precariedad en el trabajo, que en la Unión Europea está aumentando, pero también se quiere incidir en la protección de los riesgos para la salud en las empresas. En el encuentro, se pretende explorar medidas para avanzar en la conciliación de la vida laboral, a la vez que se buscarán cauces para establecer cuál es el salario adecuado y si se puede tender hacia una armonización sociolaboral y salarial en los países comunitarios. El concepto de «flexiseguridad» estará presente en ese debate, dado que en los países más avanzados en materia social consideran que «supone una modernización del derecho al trabajo, haciendo compatible la movilidad de un empleo a otro, pero sin perder los derechos económicos». También se discutirá sobre los trabajadores autónomos y el papel que deben tener. Chirac insta a la UE a que «ejerza la soberanía
económica»
El presidente francés, Jacques Chirac, insta a la UE a que ejerza «su soberanía económica» y aplique «una política comercial ofensiva», como lo hacen otras potencias. Entre las reclamaciones, pidió una política monetaria activa. En este sentido, un informe de American Express indica que los tipos de interés llegarán al 4% en 2007en la UE. -
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