La UE subraya que Kosovo no debe sentar precedente para otros conflictos
La Presidencia de turno alemana de la Unión Europea aseguró ayer que el proceso de Kosovo hacia su independencia, que deben negociar los gobiernos de Belgrado y Pristina, «no debe servir como precedente para otras regiones». El ministro de Estado alemán para Asuntos Europeos, Günter Gloser, aseguró que hay un procedimiento a seguir en la antigua Yugoslavia y recalcó que es «sólo para Kosovo».
BRUSELAS
Alemania, que ejerce este semestre la presidencia de turno de la Unión Europea, dejó claro ayer que la situación de Kosovo, cuyo estatus final deberá negociarse entre Belgrado y Pristina basándose en una propuesta de la ONU, que podría plantear la independencia de la provincia serbia de mayoría albanesa, no sienta «ningún precedente para otras regiones». «Hay un acuerdo muy claro respecto al procedimiento que hay que seguir en la antigua Yugoslavia y siempre se ha dicho con claridad que es sólo para Kosovo y que no sienta ningún precedente para otras regiones», resaltó el ministro de Estado alemán para Asuntos Europeos, Günter Gloser, al ser preguntado si no temía que la cuestión de Kosovo pudiera alentar los deseos independentistas de otras naciones, como las repúblicas caucásicas. «Se lo hemos dicho con toda claridad no sólo a esos países sino a los socios que tenemos», insistió junto al alto representante de la UE para Política Exterior y Seguridad Común, Javier Solana, y el ministro español Miguel Angel Moratinos, en su calidad de presidente en ejercicio de la OSCE (Organización para la Seguridady la Cooperación en Europa).
Neutralidad
Moratinos aseguró que la OSCE actuará con neutralidad y que necesitará un nuevo mandato de la ONU para llevar a cabo su misión en la zona, una vez que cambie el estatus de la provincia. También Solana garantizó la cooperación de la UE para asumir el relevo de la misión de la ONU en Kosovo cuando se defina el nuevo estatuto. Ni Solana ni Gloser quisieron adelantar el escenario que abriría un virtual veto de Rusia en el Consejo de Seguridad de la ONU, tal y como viene amenazando Moscú. El enviado especial de la ONU, Martti Ahtisaari, presentará a principios de febrero sus recomendaciones sobre el estatuto final de Kosovo, una provincia serbia de mayoría independentista albanesa bajo administración de la ONU desde 1999, e iniciará negociaciones con Belgrado y Pristina. La mayoría albanesa el 90% de los dos millones de habitantes quiere la independencia, a lo que se opone Belgrado, que ofrece como alternativa el «máximo grado de autonomía». Moratinos dijo que Madrid espera durante su presidencia de la OSCE «algunos avances» en los conflictos latentes que afectan a la región moldava del Cisdniéster y a la disputa territorial que enfrenta a armenios y azerbaiyanos en torno al enclave de Nagorno Karabaj.
Nueva polémica tras apoyar Royal la soberanía de Quebec
GARA
PARIS La candidata del PSF a la Presidencia francesa, Ségolène Royal, se ha visto inmersa en otra polémica tras respaldar ayer la «soberanía y libertad» de Quebec, lo que molestó al primer ministro canadiense, Stephen Harper, que consideró inadecuado que hiciera este comentario sobre una cuestión interna de su país. La falta de experiencia diplomática de Royal le ha llevado ya a cometer otros errores y ha sido acusada de hablar para contentar a su interlocutor del momento. Ayer, Royal se reunió con André Boisclair, líder del Partido Quebequés, que reivindica la independencia de su país con respecto de Canadá. Tras el encuentro, los periodistas quebequeses le preguntaron sobre sus afinidades por Quebec, a lo que respondió que «están en línea con los valores que compartimos, la soberanía y libertad de Quebec». Horas después, Harper emitió un comunicado criticando las palabras de Royal. «La experiencia enseña que es muy inadecuado que un líder extranjero interfiera en los asuntos democráticos de otro país», indicó. En su visita a Líbano en diciembre, Royal se enfrentó a críticas por no responder a un diputado de Hezbolá que comparó la antigua ocupación israelí de Líbano con la de los nazis del Estado francés durante la II Guerra Mundial.
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