ADDIS ABEBA
El presidente de Somalia, Abdullahi Yusuf Ahmed, aceptó ayer convocar una «conferencia de reconciliación en un esfuerzo por dejar atrás 16 años de anarquía y desgobierno», señaló el comisario de Desarrollo y Ayuda Humanitaria de la UE, Louis Michel.
Durante una reunión entre ambos líderes en la capital etíope, Addis Abeba, con motivo de la Cumbre de la Unión Africana (UA), Yusuf aseguró a Michel que la conferencia tendría lugar en las próximas semanas.
«El Gobierno interino ha aceptado ser el anfitrión para llevar a cabo una conferencia entre políticos, líderes religiosos y de clanes que estén listos para abandonar la violencia y discutir el futuro del país», afirmó Michel.
En declaraciones a los periodistas tras esa entrevista, el comisario europeo manifestó que estaba impresionado por el «compromiso» mostrado por el presidente somalí para la reconciliación nacional.
La Unión Europea (UE) prometió contribuir con 15 millones de euros a la misión de Paz de la UAen Somalia si el Gobierno de Yusuf tomaba las medidas oportunas de cara a una una reconciliación y, a juiciodel Michel, ya «se han alcanzado todas las condiciones para que la UE desembolse los fondos».
Por su parte, Yusuf, que canceló la rueda de prensa prevista para la tarde de ayer, indicó a los periodistas que existía un entendimiento común entre ambos líderes y un acuerdo de trabajo mutuo.
La ONU, la UA y EEUU están presionando al Gobierno títere de Somalia para que comiencen los acuerdos entre las facciones en pugna y ha urgido que el bando islamista esté representado por los líderes moderados.
La UA aprobó recientemente enviar una misión de la paz, pues las tropas etíopes están comenzando la evacuación del territorio y se teme que se cree un vacío de poder. La UA planea enviar un contingente de cerca de 8.000 soldados a Somalia, sumida en el caos y los conflictos armados desde 1991, cuando milicias leales a los jefes de los distintos clanes tribales derrocaron al Gobierno del dictador Siad Barré. Sin embargo, sólo tres países Uganda, Nigeria y Malaui respondieron al llamamiento.