Hace algunos meses, concretamente a finales de noviembre, Lakua se jactaba de la puesta en marcha de un canal comunicativo para informar sobre el proyecto del Tren de Alta Velocidad (TAV) a la ciudadanía, www.yvasca.com.

«¡Ya era hora!» pensaría alguna al oir en los medios de comunicación la noticia. «De ese modo podremos saber su trayectoria, en qué poblaciones parará...». Todavía son muchas las dudas y preguntas que una se hace acerca de este proyecto del que, paradójicamente, tanto se ha hablado.

Por cuestiones prácticas, una de las preguntas más comunes acerca del macroproyecto son las tarifas que tendrán los billetes de este medio. «¿Será asequible viajar en el TAV? Quizás la página puesta en marcha por Lakua nos aclare este punto». Pues ahí va la pregunta que realizó GARA: «¿Cuánto costará el billete del trayecto entre Gasteiz y Donostia?».

La respuesta dada desde la página es algo desconcertante: «Las tarifas del Tren de Alta Velocidad serán fijadas en su momento por las empresas operadoras». Por lo tanto, se desconoce aún si estas tarifas serán asequibles para muchas personas o sólo para una élite. Sin embargo, el mensaje pretende ser tranquilizador y añade los siguiente: «Las administraciones públicas subvencionarán este medio de transporte mediante descuentos o abonos, de manera que el servicio de alta velocidad sea la mejor alternativa de transporte para medias y largas distancias». Muy bien, pero ¿cuánto costará?

Otro punto a debate sobre el TAV es su efectividad para disminuir el tráfico rodado. Desde distintas fuentes se ha afirmado una y otra vez que la infraestructura viaria ayudará a aligerar la presión que hoy sufren las carreteras. No obstante, pese a estas previsiones, se siguen construyendo y ampliando carreteras, y ejemplo de ello es el tercer carril de la A-8. «Pero, ¿para qué?». Desde la página también se nos hace llegar su respuesta: «La Y vasca forma parte de una solución global al problema del transporte y la movilidad en Euskadi. No ha sido ideada para sustituir o enfrentarse a otros medios de transporte, sino para mejorar y complementar el sistema vasco de comunicaciones». Entonces, si el TAV no sustituye a otros medios de transporte, ¿cómo se mejorará la actual situación de colapso? «La red de Alta Velocidad ocupará su espacio en las medias y largas distancias, lo que quiere decir que atraerá a gran parte de ese tipo de desplazamientos», nos explican desde la página oficial. Lo cierto es que tras dos preguntas y sus respectivas respuestas las dudas siguen sin despejarse.

OTRA PÁGINA APORTA MÁS RESPUESTAS

Para nuestra sorpresa, tras una confusión a la hora de mandar los e-mail, recibimos otras dos respuestas desde otra página: www.y-vasca.com. A la pregunta sobre las posibles tarifas se nos responde lo siguiente: «De la experiencia del AVE Madrid-Sevilla, se puede suponer que las tarifas se pondrán para conseguir el máximo de ingresos, es decir, no muy baratas, ya que iría demasiada gente pero se ingresaría poco, ni tan caras como para disuadir a bastante gente de usarlo. Por supuesto, descarta que pueda ser más barato que el autobús».

En cuanto a la efectividad que pueda tener el TAV para mejorar la situación viaria se nos afirma lo siguiente: «El TAV nunca ha tenido como objetivo reducir el tráfico por carretera. Ya desde los primeros anteproyectos, calculan que el mismo hecho de disponer de una nueva infraestructura induce nuevos tráficos, lo cual les ayuda a justificar la nueva infraestructura y las anteriores».

Como se observa a primera vista, las respuestas de una y otra página a las mismas cuestiones son muy diferentes. Que cada quien analice cuáles son las más convincentes y, si así lo desea, remita sus dudas 0 indicaciones a la que web que más le convenza.