Andoni Arabaolaza, amigo de la montaña
Antxon ITURRIZA «AIZPEL» | DONOSTIA
El pasado viernes, dentro de la gala que celebró en Elgeta la Euskal Mendizale Federazioa para distinguir a las actividades más revelantes del año pasado, Andoni Arabaolaza, colaborador habitual de Gara, recibió el título honorífico de Amigo del Montañismo Vasco, como reconocimiento a su relevante aportación a la difusión del alpinismo.
Pero no concluyeron ahí los galardones que recibió el periodista guipuzcoano en el transcurso de la noche. Dentro del mismo acto, fue nombrado, asimismo, Amigo de la revista Pyrenaica por su continuada colaboración con la revista vasca de montaña, distinción que compartió con Juanma Sotillos, también colega en las tareas de información alpina. Todas estas declaraciones de amistad venían a premiar la línea periodística de potenciación de los conceptos vanguardistas del alpinismo y la escalada en la que Andoni Arabaolaza viene trabajando desde hace más de ocho años, especialmente a través de las páginas de la sección Mendia.
¿Qué sensación se siente al recibir estos reconocimientos a tu trabajo?
Por una parte, te invade la satisfacción porque supone un espaldarazo a tu labor profesional. Esta vez esa sensación viene acompañada de la sorpresa, porque es un premio al que no te presentas, sino que te lo conceden.
Pronto se van a cumplir ocho años de tus inicios como periodista alpino. ¿Han cambiado mucho las formas de informar durante este tiempo?
Creo que la transformación se había producido ya cuando empecé. Los caminos de Internet nos abrieron el panorama a la información internacional y de estar limitados al ámbito inmediato pasamos a estar al día de lo que ocurría por el mundo.
¿Qué experiencias agradables te ha deparado tu labor informativa?
Recuerdo el momento en que le di la mano a Jim Bridwell porque era consciente de que aquella mano era una leyenda en el mundo de la escalada. También me causó un gran impacto la personalidad de Eduardo Martínez de Pisón, con quien sentí una gran identificación de criterios y sentimientos mientras le entrevistaba. Hay también alpinistas que son punteros con los que llegas a contactar, tanto aquí como a nivel internacional, pero cuyos nombres no suenan al gran público porque no comercializan su actividad. El trato con ellos es muy gratificante porque siempre están dispuestos a colaborar, a pesar de que nos dirigimos a ellos desde un medio pequeño y establecido en un pequeño país.
¿Qué noticia te gustaría publicar?
Entre nosotros se ha popularizado mucho el ochomilismo pero apenas se han realizado ascensiones novedosas en grandes altitudes. Me haría ilusión poder relatar que unos alpinistas vascos han logrado una escalada innovadora en alguna gran montaña. Así como poder publicar que se han paralizado todas esas planificaciones de estaciones de esquí que amenazan al Pirineo.
¿Qué opinión te merece la información alpina que se difunde en Euskal Herria?
Fuera de aquí llama la atención el espacio que se le dedica al alpinismo y a la escalada en los medios de información vascos porque en el resto del estado no existe esa tradición. Con frecuencia hemos caído en la tentación de centrarnos demasiado en la agenda mediática, cuando tendríamos que intentar dar espacio a otras actividades importantes, aunque no tuvieran como protagonistas a figuras populares.
¿Con quién quieres compartir estos premios?
Con Ixiar, que es mi mejor colaboradora.