Iglesias atribuye al contexto electoral las críticas de Sanz a la CHE
GARA |
El presidente de Aragón, Marcelino Iglesias, afirmó ayer que «las riadas no son previsibles ni aquí, ni en Navarra», y se mostró «muy sorprendido» por las últimas declaraciones realizadas por su homólogo navarro, Miguel Sanz, acerca de la gestión de la crecida del río Ebro.
Sanz aseguró el domingo que, durante la crecida, se anegaron «muchísimos campos navarros» para evitar la inundación de las instalaciones de Expo Zaragoza y de algunas poblaciones aragonesas, y acusó a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) de no elevar las motas en Nafarroa para proteger precisamente estas zonas. Iglesias respondió ayer que estas afirmaciones «tienen poco que ver con la realidad, aunque en vísperas electorales siempre se oyen cosas sorprendentes».