Dos pelotaris vizcainos y además amigos volverán a protagonizar la final del Manomanista de Segunda que se disputará esta noche en el frontón de Zornotza. Además, uno de los dos aspirantes, el lemoarra Xabier Galarza repite después de no haber podido lograr la txapela y el consiguiente billete para el torneo de Primera en 2005 ante Iñigo Leiza. Como en aquella ocasión, el zaguero de Aspe volverá a partir como víctima en los pronósticas ante Xabier Urberuaga, que disputa su primera final en el campo profesional.

La experiencia suele ser un grado en este tipo de partidos, pero también puede jugar en contra en forma de presión, y es que «el síndrome Poulidor» puede afectar a Galarza VI, el más veterano en estas lides. Y es que, al margen de la final del Manomanista de hace dos años, el zaguero de Lemoa también ha disputado la final del Parejas de Segunda de esta temporada con Uriarte, sin poder calarse la ansiada txapela. «Jugar el torneo de Primera el año que viene sería muy importante, pero yo lo que quiero es ganar la primera txapela ya de una vez. Me ha tocado muchas veces ser segundo y ya va siendo hora de quedar primero».

Xabier Urberuaga, por su parte, perdió la primera oportunidad de jugar el campeonato más importante de la modalidad al caer en la previa ante Laskurain, pero ha completado un buen campeonato que lo ha colocado ante su primera final. «La clave será empezar tranquilo y no cometer errores. El saque de Galarza VI es muy peligroso y si en el saque-resto me arreglo bien tendré mis opciones. Por mi parte, tendré que arrimar mucha pelota a la pared izquierda», declaró el zaguero de Aulestia.

Por las condiciones de ambos finalistas, mantienen una gran consistencia en el peloteo, se espera una final reñida y la clave puede radicar en cómo controlan la tensión y el que menos errores cometa tendrá grandes opciones de victoria.