La exposición-homenaje que Tabacalera brinda a José Antonio Sistiaga abre hoy sus puertas
Tabacalera inaugura hoy la exposición «... ere erera baleibu izik subua aruaren...», con la que rinde homenaje a la vanguardista película homónima que José Antonio Sistiaga realizó hace casi cuarenta años.
Martin ANSO | DONOSTIA
A finales de los 60, José Antonio Sistiaga realizó sin cámara, pintando a mano fotograma a fotograma, un largometraje abs- tracto y mudo, que terminó titulándose «... ere erera baleibu izik subua aruaren...». El filme, destacó ayer Alvaro Matxinbarrena, comisario de la muestra que abre hoy sus puertas en Tabacalera, «forma parte ya de la historia internacional del cine experimental».
Cuarenta años después de aquella «hazaña» -según recordó ayer el propio Sistiaga trabajó en el filme durante unas quince horas diarias a lo largo de diecisiete meses-, Tabacalera ha querido dedicar un homenaje a la película y al autor, a quien el director del centro, Joxean Muñoz, considera «un referente fundamental de la pintura vasca del siglo XX».
«Tabacalera -recordó Muñoz- apuesta por el cruce entre disciplinas, por los lenguajes de riesgo, por la experimentación... Y, en ese sentido, la muestra es un homenaje a un precursor, porque Sistiaga tuvo el coraje de emprender una aventura así en los 60 y en un contexto como el nuestro, lo cual es absolutamente meritorio».
El filme se proyectará, tal y como lo concibió el autor, el día 21, en el Victoria Eugenia. En Tabacalera, sin embargo, se planteaba la duda de cómo hacer una exposición sobre él. Esa duda la resolvió el propio Sistiaga, proponiendo que el techo, las paredes y el suelo del edificio hagan de pantalla, de modo que interactúen con las imágenes y, en definitiva, el espacio pase a formar parte de la película.
Interpelado sobre el contenido del filme, Sistiaga fue escueto: «No es para ser explicado, sino para ser experimentado».