El Portland partió a primera hora rumbo a tierras gallegas donde hoy se enfrentará al Octavio Pilotes Posada (18.30), con la obligación de vencer en la complicada pista viguesa para cerrar la herida abierta tras la derrota con el Antequera y recuperar así la autoestima.

Después de un parón de casi dos semanas, el conjunto navarro retoma la Liga Asobal consciente de que, prácticamente, ha dicho adiós a sus opciones de título pero con la necesidad de seguir luchando para estar entre los tres primeros y lograr una plaza en la próxima edición de la Liga de Campeones.

El Portland viaja a Vigo con el único objetivo de vencer y convencer. Ganar al Octavio, un rival que ocupa el noveno puesto y sólo ha perdido un partido en casa, supondría acabar con la espiral de nerviosismo y ansiedad que rodea al equipo y, de paso, no perder la estela del Ciudad Real y Barcelona, con cinco y un puntos respectivamente por encima de los navarros. «No es fácil ganar fuera de casa y menos a un equipo como el Octavio que está haciendo muy buenos resultados. Debemos imponer nuestra calidad a sus ganas y jugar bien para ganar con claridad, que es lo que nos hace falta, porque ya no podemos cometer más errores», reconoció el técnico antoniano, Javier Cabanas.

El conjunto navarro viajó con varios jugadores tocados. Jorgensen arrastra molestias en la zona abdominal pero se espera que pueda aportar minutos en defensa, lo mismo que Nikolic, aquejado de una pequeña rotura fibrilar en el codo.