KEPA PETRALANDA

La propia Administración considera Lamiako un barrio a recuperar. Un paseo por la calle Langileria nos muestra en la actualidad el ruinoso estado de las viviendas de los trabajadores que poblaron este barrio de Leioa desde mediados del siglo XIX. Antes se había producido la urbanización de las marismas conformadas en torno al Ibaizabal y los ríos Udondo y Gobela, una vez encauzada la ría; se desecaron y se plantaron árboles para asentar la tierra, toda vez que se encauzaron los ríos Gobela -dice la sabiduría popular que es el único río que afluye «a la contra» al Ibaizabal- y Udondo.

La inicial actividad humana en el nuevo entorno fue agropecuaria, pero a finales de siglo la vega fue ocupada por instalaciones deportivas -el Athletic jugó aquí en sus primeros años- y por la industria.

Fue tras la desindustrialización de hace algo más de dos décadas cuando comenzaron a plantearse para el futuro de Lamiako iniciativas que tienen que ver con vivienda e infraestructuras, pero un proyecto que había «sonado» años atrás ha ido cogiendo cuerpo, en el contexto de la regeneración del Bilbao metropolitano; una estación depuradora de aguas residuales que por su dimensión -alrededor de 90.000 metros cuadrados- ocuparía la práctica totalidad de la superficie de la extensa vega de Lamiako.

El proyecto está muy avanzado. La Confederación Hidrográfica del Norte (CHN) señaló 2011 como año en el que entraría en funcionamiento y adelantó que las obras comenzarían en 2008. Pero, como casi siempre en estos casos, oficialmente no se aclaran estas incógnitas, como tampoco se expone el proyecto, algo que viene exigiendo la plataforma conformada por las asociaciones vecinales Lamiako, Auzotik y Txorierri.

Al igual que lo ocurrido en otros puntos de la geografía vasca cuando se ha pretendido sacar adelante infraestructuras rechazadas por la iniciativa vecinal, muchas ventanas de viviendas de Lamiako y La Txopera muestran carteles con textos contarios a la depuradora. «Los problemas derivados de su instalación, como olores y riesgo de escapes tóxicos, no sólo afectarán a los barrios más cercanos, sino también a otros núcleos como Las Arenas -Getxo- y Astrabudua -Erandio-. La naturaleza no entiende de ricos y pobres», han manifestado portavoces de estas asociaciones de vecinos.

Tal y como ha adelantado la CHN, la inversión prevista supera los 200 millones de euros. La Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Lamiako estaría conectada a través de un túnel bajo la ría con la de Galindo, en Sestao. Esta última presta en la actualidad servicio a 800.000 vecinos de Bilbo y su entorno.

A pleno rendimiento, se prevé que la infraestructura a ubicar en Leioa daría servicio a 225.000 personas -buena parte de Uribe Kosta y Txoriherri- bajo el argumento de que la nueva depuradora «aliviaría» el funcionamiento de la de Ezkerraldea.

Anuncio de cubrimiento

Hay otras cuestiones que el movimiento vecinal pretende aclarar y tiene que ver con el anuncio que hicieran responsables de la CHN en cuanto a que, al igual que una depuradora existente en Zaragoza, la EDAR de Lamiako sea una instalación cubierta. Además también se ha señalado que la reordenación del entorno derivada de su construcción supondría surprimir la actual carretera junto a la ría, que sería desviada hacia los actuales viales de Lamiako y La Txopera. En este contexto y dando por bueno el proyecto, el grupo juntero del PP ha propuesto un nuevo aparcamiento para la Margen Derecha que facilitaría la conexión con el metro.

El grupo juntero de ANV, por su parte, ha mostrado su rechazo al proyecto, pese a no estar contra el tratamiento de aguas residuales. Su alternativa, reducir su tamaño, «plantear depuradoras más pequeñas y que den servicio a un núcleo más reducido de población», en la línea de que la de Lamiako sirva a su entorno cercano, mientras que Getxo, el resto de Uribe Kosta y Txoriherri deberían contemplar otros proyectos. Los vecinos recuerdan que hay viviendas a 300 metros de donde se quiere levantar la planta, el lugar en el que se iba a construir un polideportivo «o equipamiento vecinal». Creen que Lamiako es el lugar escogido «porque fue, es y será el barrio pobre de la comarca», aunque no renuncian a seguir trabajando por una regeneración urbanística y social «sin cabida» para la depuradora.