crónica | la cuestión balcánica
El Gobierno de Montenegro busca integrar a sus minorías
Expertos de distintos países reunidos en diciembre en Podgorica bajo los auspicios de Project on Ethnic Relations (PER), un instituto impulsado por la Agencia de EEUU para el Desarrollo, constataron que Montenegro, el último estado que ha accedido a la ONU, está desarrollando una política que busca integrar a las minorías y que calificaron de positiva.
Martxelo DÍAZ
En Montenegro, además de los serbios, que comparten idioma y religión con los montenegrinos, existen minorías bosnias, croatas, albanesas y gitanos Roma.
El Gobierno de Podgorica se ha planteado no caer en el error de discriminar a las minorías que alberga en su seno, para evitar que en el futuro puedan surgir tensiones, tal y como ha ocurrido en numerosas ocasiones en los Balcanes.
«Queremos que Montenegro se convierta en un modelo a seguir en unos Balcanes que se han caracterizado por ser especialmente convulsos», señaló el vicepresidente del Parlamento de Podgorica, Rifat Rastoder, en las jornadas celebradas en diciembre en las que además de miembros del Gobierno montenegrino participaron líderes de las minorías étnicas y representantes de los partidos parlamentarios, junto a expertos y diplomáticos extranjeros.
La nueva Constitución montenegrina, que previsiblemente será ratificada en un plazo de tres meses, prevé que las minorías tengan una representación propia, garantizada por una legislación específica.
Uno de los mayores problemas a los que se enfrentan es conocer exactamente cuántas personas forman parte de cada una de estas minorías. El censo de 2003 -realizado poco después de que Yugoslavia dejara de existir y adoptase el nombre de República de Serbia y Montenegro-, por ejemplo, establece que el porcentaje de gitanos Roma era del 0,4%, pero estimaciones más realistas, y más recientes, establecen que el número real podría ser más del doble, superando el 1%.
Hasta 2013 no está previsto que el Gobierno de Montenegro realice un nuevo censo que permita conocer más exactamente cuál es la composición étnica de esta república que formó parte de Yugoslavia.
A diferencia del tratamiento que los gitanos roma reciben en otro países del área -las denuncias por discriminación son numerosas en Eslovaquia, un estado miembro de la Unión-, Montenegro dispone de partidas presupuestarias destinadas a programas para esta minoría.
El Ejecutivo de Podgorica ha puesto en marcha un fondo económico destinado a las minorías. En principio, los gitanos Roma serían los principales destinatarios para favorecer su integración social, ya que las carencias en este sentido en el resto de comunidades no son tan sangrantes.
Particularidades propias
Cada una de estas minorías, sin embargo, tiene marcadas unas prioridades para ser objeto de las ayudas del Gobierno montenegrino. En el caso de los albaneses, se reclama una especial atención a la educación, teniendo en cuenta que tienen un idioma diferenciado respecto a la mayoría de montenegrinos; mientras que entre los croatas, se considera más importante poner en marcha programas para la creación de empleo.
Otro de los retos que se ha planteado el Gobierno de Montenegro -que cuenta con un Ministerio de Derechos Humanos y de las Minorías, dirigido por Fuad Nimani- es lograr que los montenegrinos que no pertenecen a ninguna minoría consideren la pluralidad étnica del país como una riqueza y no como un problemas.
Así, Podgorica considera que no es suficiente con garantizar a las minorías el derecho a poder expresarse en su propio idioma, sino que defiende que los montenegrinos puedan acceder al conocimiento de estas lenguas sin tener que pertenecer a estas minorías. En este sentido, se considera esencial que las lenguas minoritarias puedan tener acceso a los medios de comunicación electrónicos e impresos.
Asimismo, Podgorica considera esencial garantizar la presencia de las minorías en la Policía y en el Ejército, especialmente en las áreas donde estos pueblos son mayoría, como las ciudades de Ulcinj (albanesa) o Herceg Novi o Kotor (con amplia presencia croata).