La mayoría de los grupos del Parlamento de Gasteiz están a favor de debatir sobre la colocación de banderas en el edificio. A raíz de la sentencia del Tribunal Supremo que obliga a colocar la bandera española en el exterior de la Cámara y la decisión de la Mesa de instalarla «en las próximas semanas», Eusko Alkartasuna presentó una proposición no de ley pidiendo que sólo ondee la ikurriña. La Mesa, con el voto de Izaskun Bilbao (PNV), Isabel Celaá (PSE) y Carmelo Barrio (PP), se negó a aceptar esta petición, aduciendo que era una decisión que le correspondía en exclusiva. EA pidió la reconsideración de este veto y ayer obtuvo en la Junta de Portavoces el apoyo de PNV, Ezker Abertzalea, EB y Aralar.

Pese a ello, hay dos problemas. Por una parte, que el voto favorable del portavoz del PNV, Joseba Egibar, no predetermina qué decisión adoptará la presidenta de la Cámara, Izaskun Bilbao, en la próxima reunión de la Mesa. El segundo impedimento es que, aunque el martes la Mesa acepte tramitar la proposición no de ley de EA, es probable que ya no queden plenos en los que debatirla antes del periodo inhábil de enero y la disolución de la Cámara ese mes para convocar nuevas elecciones.

Queja de Ezker Abertzalea

En el transcurso de la Junta de Portavoces, Ezker Abertzalea se quejó a la presidenta del comportamiento de la Mesa. Primero recordó que la composición de la misma no obedece al reparto de escaños en el Pleno, puesto que el grupo de Nekane Erauskin está excluido del órgano pese a contar con más escaños que EA y EB. Y en segundo lugar exigió que antes de adoptar decisiones que comprometen a todo el Parlamento, como la colocación de banderas, debería escucharse a la Junta de Portavoces.

Existía cierta expectación por saber qué votaría el PNV después de que la presidenta de la Cámara, la jeltzale Izaskun Bilbao, se opusiera a que la Mesa tramitara la propuesta de EA. Joseba Egibar señaló que la petición de que el tema se debata «no desautoriza a Bilbao». Además añadió que no sabe qué decisión se adoptará en la Mesa porque «cada órgano parlamentario cumple su función y los grupos tenemos derecho a expresar nuestra opinión».

PSE y PP criticaron a los partidos que solicitaron la reconsideración, puesto que sostienen que la obediencia a las sentencias de los tribunales no puede ser sometida a debate y votación. Desde el PSE, José Antonio Pastor afirmó sorprenderse del «cambio de criterio» del PNV, que atribuyó a «la descomposición del tripartito» y de la formación jeltzale.