Alberdania, siete traducciones del euskara al castellano
Siete títulos, escritos originalmente en euskara, cuentan ahora con su versión en castellano. Alberdania pretende así establecer una vía de salida a otros mercados para los textos de autores euskaldunes y dar la oportunidad de conocerlos a los castellano-parlantes.Ane ARRUTI | DONOSTIA
«Sorpresa es lo que se van a llevar seguramente los castellano-parlantes cuando se den cuenta de lo que se escribe en euskara». Fueron las palabras de Patxi Zubizarreta, autor de «Eztia eta Ozpina» y que ahora ha traducido como «De hiel y de miel». Se trata de uno de los siete libros que ha publicado la editorial Alberdania. Los autores de las historias originales se mostraron ayer muy optimistas con las ediciones en castellano, por todas las posibilidades que ello ofrece.
Otro de los textos es «Cuándo alargar el paso» («Pausoa noiz luzatu») del bertsolari Andoni Egaña. Una historia que narra la vida de una persona real que falleció hace diez años, un fraile franciscano de Zarautz que participó en la sublevación de Jaca de 1930 en favor de la República. Egaña se mostró muy satisfecho por el trabajo que ha realizado el traductor Gerardo Markuleta, y manifestó que «aunque el idioma en el que escribo sea el euskara, para mí es muy importante que gente muy cercana, como puede ser el vecino del cuarto, pueda leer mi trabajo y entenderlo».
«Monte arriba, ¡los vascos!» es el título que ha elegido Joxean Sagastizabal para su exitosa novela «Kutsidazu bidea, Ixabel». Una novela que cuenta ya con 43 ediciones, más de 30.000 ejemplares vendidos, una segunda parte literaria, una obra de teatro, una película e incluso una serie de televisión. Con la traducción de Jorge Giménez Bech, los lectores podrán comprender las aventuras que el autor vivió en su propia piel en un caserío de Tolosa, «pueblo situado en la procelosa Guipúzcoa profunda y último puerto de la civilización», según arranca la historia.
Jokin Muñoz presentó «El camino de la oca» («Antzararen bidea»), novela que ha conseguido el Premio de la Crítica y el Premio Euskadi de Literatura en el presente año, junto a otro premio que le concedieron los lectores. Es una historia que transcurre entre la Ribera navarra del año 1936 y el caluroso verano del 2003 en Donostia, con chapapote incluido.
El guipuzcoano Juan Kruz Igerabide ha traducido «Hauts bihurtu zineten» bajo el título «Nos queda la ceniza». Esta novela cuenta la historia de un adolescente que crece en un ambiente de extrema izquierda en los últimos años de la época franquista. Destacan las vivencias de los personajes, entre ellos la maestra del pueblo, a quien conocemos a través de los ojos del joven protagonista.
«Fuego de paja» es el título de la traducción de «Lasto sua», del iruindarra Aingeru Epaltza. Una colección de ocho relatos breves de gran variedad de temas, llenos de humor y de ironía, «ocho antorchas de paja que le ofrecen una literatura de elevada temperatura». El texto comienza con una visión trágica y futurista del conflicto vasco, con una guerra entre los diferentes cuerpos policiales de cada territorio.
Por último está el título de Javi Cillero «Ciudad de locos» («Ero hiria»), que ha sido traducido por Carlos Cid. La ciudad norteamericana de Reno se convierte en protagonista de los cuentos, cosa que condiciona por completo al resto de los personajes. Lo que les sucede pierde total importancia.
El libro de Patxi Zubizarreta está incluido en la colección Astiro mientras que los seis restantes se suman a ALGA (Alberdania Gazteleraz). Todos los autores quisieron resaltar la importancia de estas ediciones. Por un lado, tener «algo» con el que presentarse fuera de Euskal Herria, no sólo en el Estado español, sino también en Latinoamérica, incluso en Estados Unidos. Pero más que llegar a muchos sitios, confesaron que les hace especial ilusión que gente muy cercana les pueda leer y entender. Destacaron también que estos libros servirán para que mucha gente se de cuenta de la calidad y la buena salud con la que cuenta la literatura en euskara.
Alberdania cumple su aniversario número quince. Unos de sus objetivos es conseguir, con la línea editorial en castellano, un lugar equivalente al que tiene en el mercado con la de euskara.
La editorial creará una oficina de comunicación dedicada a la comunicación permanente, paralela a la ya existente oficina de autor, especializada en la venta de derechos de traducción.