Piratas informáticos consiguieron introducirse en el programa armamentístico más costoso del Pentágono, el proyecto de cazas F-35, afirmó ayer el diario «Wall Street Journal» citando a antiguos y actuales responsables del Gobierno de EEUU. Explicó que hackers consiguieron copiar datos referidos a este programa de 300.000 millones de dólares, bautizado también como Joint Strike Fighter (JSF), lo que podría volverlo más vulnerable.

En los últimos meses se detectaron intrusiones similares en el sistema de control aéreo del Ejército del Aire, según el diario. Bryan Whitman, portavoz del Pentágono, admitió el aumento en el número de tentativas, sin confirmar la información periodística, y recordó que el Pentágono pensaba aumentar su capacidad en materia de ciberseguridad.