«Nuestro hermano murió en un accidente que se podía haber evitado»
Nagore y Unai Irazabal, hermanos de Asier Irazabal, el joven que hace ahora un año murió trabajando en las obras de la Supersur, denunciaron ayer que «nuestro hermano murió hace un año aplastado por una roca en un accidente que se pudiera haber evitado». Según explicaron, hubiera bastado con mover unos metros la máquina y haber detenido su funcionamiento, pero se trabajaba a altos ritmos. Un juzgado de Bilbo ha estimado, sin embargo, que no existen responsabilidades penales.