Segunda victoria del Caja Laboral Baskonia en la final de la Liga ACB
Lógica 0, elegidos para la gloria 2
Splitter apenas apareció, pero entre el gran partido de San Emeterio y Huertas y un final de infarto, el título está a un solo paso.
BARCELONA 69
CAJA LABORAL BASKONIA 70
Arnaitz GORRITI
¿Alguien se lo cree? Quien suscribe, no. Caja Laboral Baskonia ganaba 65-70 tras una remontada, al más puro estilo de la táctica del conejo -pese al escaso concurso de Splitter-, y Mickeal anotaba. Con 67-70 y 1,6 segundos por jugar, Pau Ribas sacaba mal y perdía la bola. Acto seguido, San Emeterio veía una falta antideportiva y Basile metía los dos tiros libres. 69-70 a 1,6 segundos y balón para el mejor Barcelona. Pero Pau Ribas enmendaba su primer error robando un balón providencial.
El Caja Laboral Baskonia domina la serie final de la Liga ACB por 0-2 tras robar dos victorias de una cancha inexpugnable, y el martes, aunque con este Barcelona hay que tener mucho ojo, puede caer el título de liga más inesperado. Lógica 0 - Elegidos para la gloria 2.
Llegó con el más difícil todavía, ya que el Barcelona supo parar a Splitter. El de Joinville hizo lo que pudo, pero no anotó hasta el último cuarto, y sólo aportó 4 tantos y 6 rebotes -incluido el único rechace ofensivo que capturó el cuadro baskonista en todo el partido-. Los de Ivanovic hallaron la solución en San Emeterio y Huertas, que aparecieron en el momento justo.
Expediente X
Se invirtieron los papeles. El Barcelona buscó la ventaja desde el interior mientras que la escuadra gasteiztarra respondió, a falta del poste brasileño, desde fuera. El partido comenzaba frío y desconcertante, con muchas faltas y el juego trabado. Los hombres de Xavi Pascual, a pesar de los problemas de faltas de Lorbek, Navarro y Rubio, mandaban en el marcador ante un Caja Laboral Baskonia que sufría en el rebote. Por contra, varias canastas de Oleson y un buen porcentaje desde la línea de tiros libres mantuvo a los gasteiztarras cerca de la nuca culé: 38-33 al descanso.
El tercer cuarto fue aún peor. Ambos equipos dieron un recital de balones escapados de las manos, pases al rival y canastas fáciles erradas. Hubo momentos -con caídas en transiciones al más puro estilo de los encierros de San Fermín- en los que los jugadores parecían de minibasket. Expediente X.
El Baskonia aprovechaba ese desbarajuste para mantenerse en el duelo. Sin embargo, Lakovic dio con dos triples seguidos la máxima de ocho tantos, 53-45 a los azulgranas. Dos tiros de Herrmann pusieron el 53-47 al final del tercer período.
Era el momento de culminar la táctica del conejo; es decir, remontar. Splitter anotó al fin, y San Emeterio, el mismo defenestrado del pasado año, dio el arreón final. Dos triples y una penetración ponían a los baskonistas por delante.
Y una vez arriba, Huertas clavó «su» triple: 61-65. El Barcelona perdió los papeles. Sólo Mickeal y Morris estuvieron a su nivel, mientras Rubio y Navarro se mostraban superados por los acontecimientos. Todo parecía ganado con 65-70 a 5,8 segundos. Pero no lo estaba, y sólo el postrero robo de Ribas certificó el triunfo. Aunque la final sigue abierta, el título está al caer.
Con la alegría contenida y la consciencia de que se había hecho algo enorme. En esa contradicción de emociones llegó Dusko Ivanovic ante la prensa.
«Mejor imposible, ganar los dos partidos fuera es muy bueno. Todos somos conscientes que ellos son capaces de ganar dos partidos seguidos en Zurbano. Si puedo escoger preferiría el factor pista a favor, aunque el año pasado nosotros no lo aprovechamos. Quedan tres partidos y hay que ser muy humildes».
El técnico montenegrino no quiso lanzar las campanas al vuelo y, como es su costumbre, prefirió subrayar sus errores, aunque se quedó con dos virtudes claves para ganar: la defensa, y la fe.
«Al contrario del primer partido no hemos comenzado bien, no hemos tenido paciencia. El Barcelona ha jugado mejor en defensa, y cuando había dificultades, hacíamos tiros rápidos. A pesar de todo, hemos tenido fe y defensa, lo que nos ha dado la victoria», confesó.
El héroe de la jugada final, Pau Ribas, subrayaba el trabajo mental y de preparación de su equipo para los dos partidos del Palau Blaugrana.
«Hemos planteado muy bien los partidos, sobre todo mentalmente. Pensar que con estas dos victorias está todo hecho sería un error. Hemos de seguir trabajando minuto a minuto».
Por su parte, Herrmann era lapidario sobre lo que resta de liga. «Nuestro objetivo era conseguir un partido y nos llevamos dos, pero el partido más importante será el próximo». A. G.
La ampliación del Buesa Arena deberá acabar antes del martes, porque no va a haber sitio. Desde el Baskonia anunciaron que su web quedó colapsada por los aficionados que trataban de obtener una localidad para el tercer encuentro.
