La asociación Mendiak Aske volvió a reiterar ayer su oposición al proyecto del Parque Eólico de Canto Blanco de Araba. El alcalde de Erribera Goitia, Jesús Berganza, y el presidente de la Junta Administrativa de Artaza, Luis Vidal Ruiz de Lezana, fueron los encargados de ofrecer la rueda de prensa.

Ambos trataron sobre el parque eólico de Canto Blanco, donde se pretende construir un complejo de ocho aerogeneradores. Lo molinos proyectados tendrían una altura de 126,5 metros y un medidor de viento de 80. La Diputación de Araba se mostró «muy preocupada» porque según las conclusiones de los técnicos forales, si se materializa el proyecto, «el valle salado y su interés turístico resultarían afectados».

Tal y como vienen haciendo desde que se conoció el proyecto, el alcalde de Erribera Goitia y el presidente de la Junta Administrativa de Artaza mostraron ayer su oposición. Jesús Berganza declaró que pretender hacer un parque eólico en Canto Blanco es «inadmisible» para su alcaldía. Razonó su postura manifestando que el proyecto «afec- taría al paisaje, a la avifauna y a la conectividad ecológica que este monte desempeña». Por otra parte, se quejó de que el parque «no respeta» las peticiones que tanto el Parlamento de Gasteiz como las Juntas Generales de Araba han solicitado al Gobierno de Patxi López.

De la misma forma, Berganza explicó que dicho proyecto «incumple» lo acordado por las Juntas Generales cuando aprobaron el denominado Plan Mugarri y denunció que «la voluntad de la ciudadanía alavesa queda supeditada a los intereses ocultos de las empresas». Aun así, el primer edil de Erribera Goitia se mostró favorable a energías renovables, incluida la eólica, pero expresó que «los valores naturalísticos deben prevalecer por encima de los económicos».

En el caso de Luis Vidal, éste solicitó al Gobierno de Gasteiz que respete la decisión tomada por el concejo de Artaza, que fue la de rechazar la colocación de aerogeneradores en el monte Canto Blanco. De esta forma, como titulares de los montes catalogados de utilidad pública, estos pueblos no autorizan que en ellos se lleve a cabo «ningún tipo de obra».

Luis Vidal dijo que El Gobierno «tiene que comprender que la función de los montes alaveses no es la de soportar esta industria sino la de seguir dando la vida que desde siempre han aportado».

En el caso de materializar este proyecto, la mayor afección no vendría de los aerogeneradores, sino de la línea de evacuación de energía que constaría de 18 apoyos metálicos de 40 metros extendidos a lo largo de 5,17 kilómetros que «afectan de lleno» al procedimiento para nombrar Biotopo Protegido al Diapiro de Añana, «uno de los principales valores» del valle.