En solidaridad con los presos políticos vascos que se encuentran inmersos en una dinámica de lucha contra la política penitenciaria, durante el pasado fin de semana medio centenar de personas se trasladaron desde Debagoiena a la prisión francesa de Saint Martin de Ré. En el exterior del reclusorio, cerca de los muros, hubo bertsolaris, con conciertos de música, txalaparta y trikitixa.

Además, repartieron folletos informando sobre la situación que padecen los presos vascos a los vecinos del lugar. Según pudieron constatar los familiares y amigos, los reclusos «sintieron con emoción» los ánimos recibidos desde el exterior.

Por otra parte, según informaron desde el movimiento pro amnistía, las presas vascas de la prisión de Alcalá han comenzado una huelga de hambre para exigir que se respeten sus derechos básicos. Alertan de que en la sección de mujeres, últimamente, las presas están siendo aisladas, una por una.

Represión en Nafarroa

La Policía española y la Policía Foral trataron de obstruir varias concentraciones que se celebraron en Iruñerria en defensa de los presos vascos la semana pasada. En Atarrabia, por ejemplo, tanto la Policía española como la Foral se personaron al lugar donde llevaban a cabo una concentración e identificaron a 35 personas. Además, retiraron una pancarta donde ponía «Inkomunikazioa = tortura». En Burlata y Txantrea la Policía española identificó a todas las personas que participaban en la protesta. Además, en Txantrea se llevaron las palas con nombres de presos y amenazaron con enviar el informe a la Audiencia Nacional; lo mismo ocurrió en el barrio de Donibane. En Iruñea, fue la Policía Foral quien se personó la a concentración del viernes y también aprehendieron las palas.

Ayer fueron 93 los concentrados en Ondarroa, 43 en Laudio, 19 en Ordizia, 30 en el barrio bilbaino de Rekalde y 18 en el de Otxarkoaga, 38 en Trintxerpe, 45 en Iurreta, 95 en Santurtzi, 30 en Ataun, 30 en Zaldibia, 11 en Euba, 11 en Añorga y 23 en Altza.