El brillante escaparate de Primera vuelve a estar muy alto para Mikel Olaetxea. Campeón de la jaula de plata en 2008 tras una vibrante y emocionantísima final disputada ante Aratz Mendizabal (22-21), el delantero de Lizartza sigue en la pelea por tratar de hacerse un hueco entre los grandes.

Siendo el Cuatro y Medio una distancia que se amolda a sus características, la edición del año pasado era una buena oportunidad para reivindicarse, pero en su camino se topó con el mejor Retegi que se recuerda y sólo pudo meterle 8 tantos en un partido disputado en Errenteria.

Las caprichosas bolas del sorteo han vuelto a ser crueles con él, ya que lo han emparejado con uno de los rivales, a priori, más complicados; un Patxi Ruiz que vuelve por sus fueros y al que el campeonato pilla en un momento óptimo tras superar muchas adversidades.

«Pese a que me desenvuelvo en el Cuatro y Medio, creo que, comparado con Patxi y con éstos, todavía no soy nadie, pero quiero meter un poco el morro entre ellos, aunque sé que es muy complicado», declaró.

Olaetxea quiere mirarse en el espejo de Iñigo Díaz que, tras dos intentos fallidos tras su txapela de Segunda en 2007, este año ha dado la campanada eliminando a Asier Olaizola.

Quizá por ello pretende emular a su compañero de Asegarce, por lo menos en su idea inicial de lo que será el partido del sábado en el Labrit. «Mis posibilidades pasan por rematar todo lo posible, no dejarle pelotear. En todas las oportunidades que tenga iré a atacarle y a ver cómo salen las cosas», comentó en manifestaciones recogidas por Euskadi Irratia.

Preguntado por sus sensaciones previas al partido, el delantero de Lizartza entiende que son buenas, pero también debían serlo la temporada pasada y el resultado no fue nada satisfactorio. «En primera hay otro nivel. El año pasado tuve la oportunidad de debutar, pensaba que iba en condiciones, bien preparado, pero me tuve que ir a casa con ocho tantos. Este año voy con toda la ilusión, creo que he hecho bien las cosas, pero también sé que hay otro nivel y que tendré que hacer las cosas muy bien si quiero darle un poco de trabajo», apuntó.

Xala contra Iker Arretxe

Por la tarde, la elección de material se trasladó a Sodupe, donde Xala se medirá mañana a Iker Arretxe en el partido que abrirá la segunda jornada. Como a la mañana en Iruñea, el material no fue objeto de ninguna crítica, pero Xala dejó entrever ciertas dudas sobre su estado, algo que no es nada halagüeño conociendo al de Lekuine.

«Desde que me lesioné en la rodilla en la Final del Torneo de Donostia no he terminado de quitármelo de la cabeza. Las sensaciones de los últimos entrenamientos han sido buenas, pero el miedo todavía no lo he quitado. En los partidos por parejas que he jugado no he tenido molestias», apuntó a la página web de su empresa. «Es muy fácil decir que sólo me falta el campeonato del Cuatro y Medio para redondear el año. Yo empiezo desde abajo y me ha tocado un rival muy fuerte».