Bloqueo del tráfico en la A-63 «para cortar» la reforma de las pensiones
A medida que se acercaba el debate de la ley de reforma de las jubilaciones en el Senado -que analizará varias enmiendas hoy-, la dinámica movilizadora ha ido en aumento. Ayer, varios centenares de huelguistas cortaron el tráfico en los peajes de Biriatu y Bénesse-Maremne, en la A-63. Otros ocupaban las oficinas de CRAMA en Baiona y varios liceos seguían bloqueados por los estudiantes. Para hoy los sindicatos han convocado una acción en el puerto de Baiona.
GARA
Convocados por la CGT, decenas de huelguistas interrumpieron ayer el tráfico en dos puntos de la A-63. En concreto, hacia las 11.00, unos 300 bloquearon el peaje de Bénesse-Maremne, a unos kilómetros al norte de Baiona, mientras que, a la misma hora, otra cincuentena se apoderaba de los carriles de paso del de Biriatu.
La acción de protesta, bastante inusual en las movilizaciones sindicales en Ipar Euskal Herria, provocó retenciones kilométricas que duraron varias horas.
A pesar de los trastornos registrados, tanto los conductores de los numerosos camiones de transporte que llegan del norte de Europa para atravesar los Pirineos en Biriatu como los de los vehículos particulares se mostraron, en general, comprensivos y solidarios con los trabajadores. Bien es verdad que los huelguistas alternaban el bloqueo con aperturas frecuentes de las barreras del peaje con el fin de evitar el colapso en la autopista.
Incluso los gendarmes que se encontraban en el paso landés demostraron cierta empatía para con los trabajadores que reivindicaban la retirada de la ley de reforma de las jubilaciones y ni siquiera intervinieron para impedir el corte del tráfico.
La dinámica movilizadora se reflejó también en la capital labortana, donde varias decenas de miembros de los colectivos Oldartu (en el que participa el sindicato LAB) y Appel Retraites Pays Basque ocuparon las oficinas de CRAMA (entidad que se ocupa de la gestión de las solicitudes de jubilación).
Los trabajadores subrayaron que se trataba de una acción «pacífica y simbólica» y no impidieron la actividad normal en la entidad.
Mientras tanto, ayer continuaron también los bloqueos en diversos liceos (Baiona, Biarritz, Angelu, Donibane Lohizune) y, como durante toda la semana, el tráfico de trenes sufrió grandes perturbaciones.
Hoy, en el puerto
Para hoy, a primera hora, la intersindical ha convocado una acción en la entrada de la zona industrial portuaria de Baiona-Bokale a la que también se ha unido el sindicato LAB.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, se mostró ayer dispuesto a ir hasta el final con su reforma del sistema de pensiones. «Llevaré a término la reforma de las pensiones porque mi deber como jefe del Estado es garantizar a los franceses que tanto ellos como sus hijos podrán contar con su jubilación y que se mantendrá el nivel de las pensiones», subrayó Sarkozy durante el Consejo de Ministros semanal. Además, ante los problemas de aprovisionamiento de carburantes, dio «instrucciones para desbloquear la totalidad de los depósitos de carburantes para restablecer lo más pronto posible una situación normal», porque «el desorden provocado por esos bloqueos causa numerosas injusticias» con «la mayoría de los franceses que quieren poder seguir trabajando y circulando libremente» y porque podría «tener consecuencias en términos de empleo» al perturbar la actividad económica.
Su ministro de Interior, Brice Hortefeux, anunció que de madrugada la Policía había desbloqueado los accesos de los depósitos de La Rochelle, Donges y Le Mans, que se suman a los 21 en los que desde el pasado viernes había intervenido la fuerza policial.
El martes por la tarde el carburante se había agotado en unas 4.000 gasolineras de las 12.500 del Estado francés. El titular de Interior admitió que el fenómeno de acaparamiento se había disparado y las ventas se habían disparado el fin de semana un 500%.
Ayer continuaron los paros en algunos sectores estratégicos, como las refinerías o los transportes (lo que afectó a trenes y vuelos) y se organizaron acciones de bloqueo de diferentes infraestructuras. GARA