Cinco trabajadores de Dinamobel se encerraron ayer por la tarde en la iglesia iruindarra de San Lorenzo, anunciando que no dejarán la protesta hasta que se solucione el conflicto laboral que se vive en su empresa, que podría acabar con medio centenar de trabajadores en la calle. Según informaron a GARA fuentes de la plantilla, está previsto que se les sumen hoy dos delegados sindicales.

Tal como explicaron el martes en rueda de prensa representantes de LAB en el comité, la dirección de la empresa ha presentado un expediente que incluye 49 despidos, y hasta ahora las partes han participado en el periodo de consultas, cuya fase final concluye hoy. Además del encierro, los trabajadores han celebrado concentraciones, tanto el martes como ayer, en las que han estado acompañados por delegados y delegadas de otras empresas del sector.

Despidos en Markina

Por otra parte, LAB denunció ayer el despido, «de la noche a la mañana», de cuatro trabajadores de la cantera de Markina, que es propiedad del grupo Amenabar. La central abertzale explicó que los despidos se producen apenas dos meses después de que Amenabar se hiciera con el control de la cantera, «sin ninguna opción de negociación», y a pesar de que dijeron a los representantes sindicales que respetarían los derechos de los trabajadores y que no preveían despidos.