Lasarte incluyó a Agirretxe entre los dieciocho que se concentraron y toda la plantilla se reunirá este mediodía para ir juntos a Anoeta
Una final con mucha ventaja
El equipo blanquiazul se juega con el Getafe la permanencia a un partido con la ayuda de que el empate le vale, del apoyo del público y de la trayectoria de los dos como local y visitante. Ninguno se plantea que su suerte dependa hoy de que acompañe otro resultado.
Joseba ITURRIA
Aunque durante estos últimos diez años se ha recurrido habitualmente a considerar como finales muchos partidos importantes en la lucha por evitar el descenso o por pelear por el título o por la permanencia, ninguno de ellos merecía ese calificativo tanto como el que esta noche enfrentará en Anoeta a Real y Getafe con una plaza en juego en Primera División.
Ninguno de los dos equipos espera que acompañe algún resultado que permita a ambos lograr su objetivo y por eso la Real y el Getafe buscarán el triunfo en una final en la que el equipo blanquiazul parte con mucha ventaja. La primera es jugar en casa en un estadio que se llenará para empujar a su equipo. La segunda, que el empate le vale, aunque si hay algún equipo que no sabe especular es la Real y no puede pensar en defender un resultado que sólo ha logrado dos veces toda esta temporada.
Además la Real está apoyada por su fortaleza en Anoeta, donde ha ganado once partidos, que contrasta la debilidad como visitante del Getafe, que sólo ha sumado fuera doce puntos, y que no gana desde que lo hizo en Almería el 19 de diciembre. Desde entonces ha sumado sólo tres puntos de 30 y ha perdido en sus seis últimas salidas. Su entrenador convocó ayer a toda su plantilla e incluso da por recuperados a dos jugadores que se consideraba descartados, Torres y Adrián Colunga, aunque no se espera que jueguen de salida.
En Anoeta se entrecruzan dos tendencias muy similares. Parecían lejos de la batalla por el descenso en enero, pero los dos entraron en unas rachas pésimas que les han metido en la lucha por la salvación, sobre todo por su nulidad como visitante. Y eso que el Getafe es un equipo que parecía más propicio para jugar fuera por la velocidad de sus jugadores más adelantados.
Por eso la Real no puede asumir riesgos y querrá buscar la victoria como siempre en Anoeta con el once habitual de Lasarte en el estadio. Lo más destacado es que el técnico uruguayo convocó ayer a Agirretxe pese a la vuelta de Tamudo y Demidov a una lista de dieciocho en la que no entraron Estrada, Labaka, Sarpong y Joseba Llorente. Sí están citados los cuatro con los convocados para comer e ir juntos en el autobús a Anoeta.
Ambiente favorable
Allí serán recibidos a las 20.30 por miles de aficionados dispuestos a llevar en volandas a sus jugadores. Desde ayer se celebra en Hondarribia e Irun el Congreso de Peñas. En la localidad costera los peñistas celebrarán un poteo y comerán antes de ir a Landetxa y desde allí salir en autobuses a Anoeta, donde recibirán a las ocho a los jugadores acompañados de txarangas. Se espera que los abonados respondan y que Anoeta roce el lleno para facilitar el triunfo de su equipo.
Martín Lasarte trasmitió su convicción de que los resultados que dejarían a la Real en Primera en caso de derrota «no se van a dar» y que bajará uno de los dos que juegan hoy en Anoeta: «Ojalá me equivoque y haya algo que nos ayude a nosotros o al Getafe, pero la semana pasada ya ocurrió y el fútbol español debe analizar estas situaciones que pasan desde que jugaba yo aquí. La mejor liga del mundo no puede tener esto. Todo depende del calendario de las últimas jornadas y con quién juegues, te ves fuera o dentro».
Cuando le comentaron que el meta del Mallorca Dudu Aouate declaró que hoy apostaría todo el dinero por el triunfo del Zaragoza en el campo del Levante, Lasarte reveló que en su vestuario escuchó a los realistas decir lo mismo: «Igual el fútbol nos da una lección y estoy dispuesto a aceptarla y pedir perdón. Ojalá mañana diga que me equivoqué y que el fútbol me demostró que es mucho más limpio de lo que uno piensa, pero...».
Comparte con Joseba Llorente que la Real debe jugar con la idea de que el empate no basta: «Debemos mostrar que estamos decididos a ganar, el rival juega y tiene sus armas y un gran entrenador, pero estamos obligados desde el inicio a hacerlo bien porque eso nos daría la tranquilidad y nos eliminaría ansiedad. Queremos ser un equipo que sepa dónde juega, como local, un equipo intenso que va a salir a buscar la posibilidad de ganar».
Recordó la fortaleza mostrada por su equipo en Anoeta y que en los últimos tres partidos ha sido capaz de superar los golpes de los goles de sus rivales. También mostró confianza en los jugadores que no seguirán en la Real como Rivas o Tamudo, del que recordó que «en la semana en la que se habló que le habían comunicado que no iba a seguir metió un gol e hizo un gran partido. Confío mucho en la gente que estamos hasta el 30 de junio, vamos a morir por lograr el objetivo y priorizar el objetivo grupal al individual».
También es casi seguro que Lasarte dirija hoy su último partido a la Real. Al respecto dijo que «mi único objetivo es que la Real consiga su objetivo. Eso pasa por ganar. Me hubiera gustado salvar la categoría con tranquilidad, que no va a poder ser, y vamos a tener que sufrir. Lo único que quiero es que la Real se mantenga. Luego tengo contrato firmado y ésa no es una pregunta para mí». Joseba ITURRIA
