PP-UPN: Un acuerdo cimentado en el miedo
Los principales dirigentes de PP y UPN formalizaron ayer el acuerdo para concurrir conjuntamente a las elecciones del 20-N. Ambas partes apelaron a sus intereses comunes para argumentar un pacto que, sin embargo, está cimentado en el miedo. Miedo a que una alianza abertzale y progresista pueda erigirse como la primera fuerza electoral en Nafarroa, lo que supondría un fuerte golpe para una derecha que hasta hace poco se creía intocable en ese herrialde. El líder del PP navarro, Santiago Cervera, lo dejó claro la víspera en una entrevista radiofónica, como antes había hecho la presidenta del Ejecutivo de Iruñea, Yolanda Barcina. Ese temor es la base de un acuerdo electoral con el que UPN dice garantizar su representación en Madrid pero que podría tener consecuencias en su equilibrio interno e, incluso, afectar a su proyecto a medio plazo. Está por ver, además, cómo gestionan su acuerdo de gobierno UPN y PSN, sobre todo cuando tras las elecciones el partido de Barcina empiece a coincidir con sus socios naturales.
Precisamente, ayer se cerró una especie de tripartito que los defensores del marco actual han construido contra las fuerzas abertzales: PSE-PP, en Lakua; UPN-PSN, en Iruñea; y ahora PP-UPN, en Madrid. Acuerdos a la defensiva que pretenden contrarrestar la fuerza de quienes realmente llevan la iniciativa.