La Diputación de Gipuzkoa entregó ayer en las Juntas Generales su proyecto de Presupuestos para el ejercicio 2012, unas cuentas marcadas por un importante recorte general del 13,30% pero que sin embargo ven cómo se aumenta en un 7,71% el gasto destinado a política social, departamento que se lleva el 47,55% del total pese a que la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) y otras prestaciones han pasado a ser gestionadas por el Gobierno de Lakua.

El diputado general de Gipuzkoa, Martín Garitano, expuso el contexto en que se han proyectado unos Presupuestos «ajustados y realistas» que necesitarán, para ser aprobados, el respaldo de al menos uno de los otros tres bloques, siendo la del PSE la opción más probable.

Garitano explicó que las cuentas son «producto de la crisis global y de la gestión poco responsable» del anterior Ejecutivo, y suponen «el primer paso en la transición hacia otro modelo». Estos presupuestos, añadió, «garantizan la calidad de los servicios públicos y van a contribuir a mejorar la calidad de vida de los guipuzcoanos».

Entres sus prioridades, enumeró «la política social, la participación, el euskara, la migración, la diversidad, la igualdad, los derechos humanos y la memoria histórica».

«No hundir el sector público»

Consideró que el camino anterior llevaría a Gipuzkoa a situaciones como las de Grecia o Italia, cuyas «políticas neoliberales les han llevado al borde del abismo». «El endeudamiento no puede ser sistemático, no queremos hundir el sector público», incidió.

El máximo representante insitucional del herrialde subrayó que «es cierto que el marco español nos lleva a la bancarrota», pero que también lo hace «el lienzo que han pintado quienes desde nuestras instituciones, con una política de gasto desordenado y un endeudamiento irresponsable, han hipotecado nuestro presente y futuro para repartir muchos dividendos entre unos pocos».

«Débiles tasas de crecimiento»

Tras esta introducción tomó el testigo la diputada de Hacienda, Helena Franco, quien arrancó su exposición desgranando los porqués de la situación actual. En primer lugar aludió a las «débiles tasas de crecimiento», que a su juicio revelan «el fracaso de un modelo, es estructural».

En ese marco, desde 2007 «los ingresos por impuestos han disminuido, mientras que los gastos se han mantenido e incluso incrementado». Para ello, se ha recurrido al endeudamiento o se ha echado mano a los remanentes anteriores (veáse cuadro inferior de la página siguiente).

Ante esta coyuntura, el nuevo Gobierno foral ha actuado, según Franco, aplicando criterios de «prudencia» para calcular los ingresos y bajo la máxima «gastemos lo que tenemos».

En este ámbito recordó que ya han puesto sobre la mesa una propuesta de reforma fiscal que busca aumentar la recaudación con la implantación de nuevos tramos del IRPF para las rentas más altas y la recuperación del Impuesto de Patrimonio, entre otras medidas.

La diputada de Hacienda explicó que a la hora de repartir las partidas «el gasto social es básico y teníamos gastos comprometidos del anterior gobierno», correspondientes a proyectos a largo plazo y que superan por tanto el periodo de una legislatura. Respecto al endeudamiento, sólo se recurrirá a él para amortizar deudas anteriores, no para financiar nuevos gastos.

Subidas y bajadas

A la hora de hablar de números concretos, los recortes más destacados se proponen en «publicidad y propaganda (45%), publicaciones (42%), exposiciones y certámenes (29%), actos oficiales y atenciones protocolarias (27%) y estudios, dictámenes y otros trabajos (22%)».

También se plantean importantes ajustes en gastos de inversión de funcionamiento como «mobiliario y enseres (16%), maquinaria, instalaciones y utillaje (13%), inversiones de desarrollo informático (13%), indemnizaciones por razón de servicio (8%) y reparación y conservación (5%)».

En el otro lado de la balanza, las partidas que más suben porcentualmente son «atención a personas mayores (15%), atención a personas con discapacidad (13%), protección a la infancia y a la adolescencia (13%) y servicios asistenciales (12%)».

También aumentará en medio punto, del 57% al 57,5%, el Fondo Foral de Financiación Municipal y se destinarán 84 millones de euros a los entes locales del territorio.

Preguntada por las posibles medidas «para incentivar la econonomía», Franco aseguró que se contemplan actuaciones en distintos departamentos, pero abogó por «racionalizar» las ayudas al tejido productivo, analizando con «seriedad la eficacia» de este tipo de políticas.

Proyectos concretos

El dossier entregado a los medios desgrana las principales líneas de actuación de cada departamento. Así, en Movilidad e Infraestucturas Viarias -quizás el gran caballo de batalla y que sufre un recorte del 37,44%- se aboga por el impulso del transporte público (28,8 millones de euros) mediante la implantación e incentivación del billete único.

También se contempla participar en la financiación de la nueva estación de autobuses de Donostia en Riberas de Loiola y ampliar la red de bidegorris. En cuanto a las carreteras, centra su esfuerzo en la conservación de las ya existentes (37,4 millones), junto a la continuación de las obras de la variante de Hernani y la ordenación de las intersecciones de las carreteras GI-120, GI-3491 y GI-3560, en Lazkao.

Respecto a las infraestructuras hidráulicas (3,2 millones), dependientes de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, se citan actuaciones concretas como la depuradora del Oria en Aduna, la finalización de obras de saneamiento en Arantzazu y Altzo y el inicio de las mismas en el Araxes, y la financiación para las obras de abastecimiento de Jaizkibel-Elordi.

En cuanto al polémico tema de los residuos, el resumen entregado habla del «seguimiento y creación de programas en materia de residuos (prevención y minimización, compostaje, nuevas líneas de reciclaje)» y de la «financiación de infraestructuras» para su tratamiento, sin especificar cuáles. En este mismo capítulo se presenta una apuesta decidida por las energías renovables (1,2 millones).

Otro de los temas candentes es el puerto de Pasaia y sus alrededores. Al respecto, se ejecutará el convenio de colaboración con el Ayuntamiento «para la regeneración integral» de la bahía y su entorno.

En el ámbito cultural, los responsables forales subrayan el respaldo a Tabakalera, con una partida de 1,5 millones. La promoción del uso del euskara, la participación en el proyecto Donostia 2016 o el impulso a Arteleku también vienen reflejados en el informe. En lo que hace referencia al turismo, destaca la propuesta de impulsar una única plataforma on-line para toda la oferta del herrialde.