ELECCIONES CONSTITUYENTES EN TÚNEZ
Al-Nahda llama al diálogo tras proclamarse vencedor en las urnas
El líder del movimiento Al-Nahda, Rachid Ghannouchi, claro vencedor de las elecciones tunecinas del domingo, insistió ayer en su compromiso con la democracia e instó a todas las fuerzas políticas del país al diálogo para formar un Gobierno basado en el acuerdo nacional. Al-Nahda, que logró el 40,6% de los votos, contará con 90 de los 217 escaños en la Asamblea Constituyente.
GARA | TÚNEZ
«La democracia es para todo el mundo», aseguró ayer Rachid Ghannouchi, líder de Al-Nahda, en la primera rueda de prensa celebrada por su partido tras el anuncio de los resultados de las elecciones constituyentes celebrada el domingo, que otorgaron al movimiento islamista moderado el 40,6% de los votos, en la que expresó también el rechazo del movimiento islamista moderado a la violencia política e ideológica. Confió en poder formar Gobierno en el plazo de diez días y aseguró que en el próximo Ejecutivo habrá mujeres, «lleven velo o no».
«Pedimos a todos nuestros hermanos, cualquiera que sea su orientación política, que participen en la instauración de un régimen democrático», agregó Ghannouchi apelando al diálogo para la formación de un Gobierno de unidad. De hecho, las negociaciones comenzaron el martes aunque no se harán oficiales hasta que se constituya la Asamblea. Al-Nahda ya ha dicho que su número dos, Hamadi Jebali, que pasó 16 años en prisión, será su candidato a liderar el Gobierno.
«La revolución no se produjo para destruir un Estado, sino para destruir un régimen. Nosotros nos comprometemos a proteger el Estado tunecino», afirmó.
En su comparecencia, aseguró que «no cambiaremos nuestros principios al pasar de la oposición al poder», ni intentarán modificar la forma de vida de los tunecinos ni impondrán el hiyab (pañuelo islámico) a las mujeres, e insistió en su compromiso con el desarrollo, las reformas, la libertad, la defensa de los derechos humanos y de la sociedad civil, además de con el Estado de Derecho y la separación de poderes. Además, declaró que «la mujer tiene un lugar especial en el proyecto de Al-Nahda» y recalcó que de las 49 diputadas que habrá en la Asamblea Constituyente 42 pertenecen a su movimiento.
Al-Nahda, cuyos miembros fueron perseguidos, encarcelados y obligados a exiliarse por el régimen de Ben Ali, consiguió 90 de los 217 escaños de la Asamblea Constituyente, que se encargará de redactar una nueva Constitución y nombrar a un nuevo Gobierno interino que, a su vez, se encargará de fijar la fecha para la celebración de las elecciones legislativas y presidenciales.
A gran distancia de Al-Nahda se situó el laico y centrista Congreso para la República (14%, 30 escaños), el socialdemócrata Ettakatol (10%, 21 escaños), Al-Aridha (19 escaños), al que la Comisión Electoral anuló los votos de seis circunscripciones, el Partido Progresista Democrático (17 escaños), Moubadra (5 escaños), el Polo Democrático Modernista (5 escaños) y Afaq (5 escaños) el Partido Comunista de los Trabajadores (tres escaños). Los doce asientos restantes serán para otras fuerzas minoritarias e independientes.
Las autoridades decretaron anoche el toque de queda en Sidi Bouzid, donde comenzaron las revueltas populares que derrocaron a Ben Ali, para tratar de poner fin a los disturbios que estallaron el jueves por la noche tras conocerse los resultados electorales y la anulación, por «no respetar el día de silencio electoral» y por «financiación ilegal de la campaña», de la lista Al-Aridha en seis distritos de la provincia, entre ellos Sidi Bouzid, donde ganó. Al-Aridha logró 19 escaños.
Las fuerzas de seguridad dispararon al aire y emplearon gases lacrimógenos ayer para dispersar a la multitud que trataba de atacar, tras unas horas de calma, la oficina del gobernador. La noche anterior, unos dos mil jóvenes se enfrentaron a la Policía, lanzaron cócteles molotov contra el Palacio de Justicia y el Ayuntamiento y saquearon la sede local de Al-Nahda.
El empresario Hechmi Hamdi, que en su día apoyó a Ben Ali, empleó su canal Al-Mustakilla para promocionar, desde Londres, su lista Al-Aridha. Ayer anunció que su formación no participará en la Asamblea Constituyente tras la anulación de parte de sus votos.
El partido islamista Al-Nahda denunció que los incidentes fueron provocados por elementos próximos a Ben Ali y llamó a la calma y a rechazar la violencia. GARA