Todos los mam�feros de este planeta desarrollan instintivamente un l�gico equilibrio con el h�bitat natural que les rodea. Pero los humanos no lo hacen. Se trasladan a una zona y se multiplican, y siguen multiplic�ndose hasta que todos los recursos naturales se agotan. As� que el �nico modo de sobrevivir es extendi�ndose hasta otra zona. Existe otro organismo en este planeta que sigue el mismo patr�n: un virus�. Me viene a la cabeza esta cita de �Matrix�, la interesante trilog�a dirigida por Larry y Andy Wachowski, al leer con detenimiento las informaciones que llegan desde Durban con motivo de la Cumbre del Clima, celebrada la semana pasada en la ciudad sudafricana.

La reuni�n ha concluido con un m�s que evidente fracaso. Nada de compromisos, ni garant�as, ni avances reales en la lucha contra el cambio clim�tico. Al contrario, han prevalecido las posiciones inmovilistas de los grandes contaminadores, que apenas se han molestado en maquillar una declaraci�n final que algunos califican de insuficiente y a m� me parece insultante. Estados Unidos, Rusia, China, India... siguen bloqueando una profundizaci�n en el esp�ritu que gener� el acuerdo de Kyoto, y optan por posponer decisiones relevantes para un futuro siempre demasiado lejano. Pretenden as� ganar tiempo cuando, precisamente, es el tiempo el peor de los enemigos de un planeta al borde del abismo del calentamiento global.

Si antes hablaba de �Matrix�, una fascinante -y, si quieren, controvertida- propuesta para la mente adulta, dentro de unas semanas se estrenar� la �ltima pel�cula de los �Muppets�� m�s conocidos en nuestro entorno como los �Tele�ecos�. Narra los esfuerzos de la rana Gustavo, la cerdita Peggy y Gonzo por impedir que un magnate destruya su teatro para hacerse con un yacimiento de petr�leo. Bajo la apariencia de inocente honestidad del argumento, los ojos escrutadores de los comentaristas de la cadena �Fox News� (admirada inspiraci�n de Intereconom�a) ven un �descarado intento comunista de manipular la mente de los ni�os y de sus padres�. No s� c�mo habla un virus, pero tiene que sonar a algo de eso.