Sergio visita por tercera vez El Molinón
Es poco habitual volver al hogar
El de Avilés advierte que el Sporting «saltará al 200%», pero que si la escuadra navarra «sabe crear ocasiones al principio y evitar el juego» de su rival, los nervios pueden surgir tras una semana en la que la afición local ha cuestionado el compromiso de los jugadores.
Natxo MATXIN
Sergio y Sporting, entidad que le vio nacer como futbolista, han llevado trayectorias muy dispares, lo que ha impedido que el jugador visite la que fue su casa con mayor asiduidad. Pese a su larga trayectoria deportiva, el defensa de Avilés disputará su tercer encuentro en El Molinón, el segundo con Osasuna, ya que jugó uno anteriormente con el Celta en el torneo copero.
La casi una década que permaneció la entidad asturiana en Segunda -entre las temporadas 1988-89 y 2007-08- y el que el espigado jugador tuvo que hacer las maletas en dirección a tierras gallegas -en la categoría de plata solo compitió con la camiseta rojiblanca la primera de esas campañas- ha provocado que deportista y el club de sus amores apenas hayan cruzados sus caminos estos años.
«Es cierto -confirmó en sala de prensa-, no he jugado tantas veces allí. Por eso es especial visitar El Molinón, ver a los amigos y la familia, pero durante 90 minutos me debo a Osasuna y respeto a una afición que me tiene un cariño especial. No estamos para resucitar a nadie y debemos ganar para contrarrestar los últimos resultados».
La escuadra navarra llega al estadio sportinguista en un momento delicado para los anfitriones, con cambio de entrenador y marejada entre semana con visita incluida de aficionados a Mareo para abroncar lo que consideran poca implicación de sus jugadores. «Es un arma de doble filo porque ellos saltarán al 200% y nosotros necesitamos estar también muy metidos. Pero si somos capaces de crear peligro en los primeros minutos, estar encima de ellos y no dejarles jugar, también es posible que la gente se ponga en contra de ellos, aunque es una hinchada que por tradición anima y está con su equipo los 90 minutos», analizó.
Partido físico
En esa misma línea, avanzó que el partido que le espera a Osasuna es, como todos los años, muy físico, más si cabe con la delicada situación del rival. «Es un equipo que, si por algo se caracteriza, es por no parar de correr y de pelear. Hay que estar preparados para luchar todos los balones y aprovechar aquellas oportunidades de que dispongamos. En definitiva, no dejarles entrar en el encuentro».
Sergio, que dejó escapar entre risas que si gana en El Molinón le daría una alegría a su padre, pues es del Oviedo, indicó que el equipo tiene que ir «a conseguir lo que no hemos hecho en estos tres últimos partidos en casa». En cualquier caso, de bien nacidos es ser agradecidos y el defensa comentó que no celebraría un gol, caso de conseguirlo en el campo sportinguista.
El técnico vizcaino Iñaki Tejada se estrenará en la máxima categoría y lo hará sin complejos. El nuevo entrenador del Sporting avanzó que pondrá en liza un 4-3-3 coincidiendo con su debut y la visita de Osasuna, si bien no quiso desvelar quiénes serán los futbolistas que tratarán de llevar a la práctica sobre el césped tan atrevido dibujo.
«Las tácticas dependen mucho de las características de la plantilla», comentó el bilbotarra, quien advirtió, en cualquier caso, de que no habrá ninguna revolución respecto a la etapa de Preciado. Así, el objetivo es idéntico: «Pillar al equipo que está delante, pero no solo esta jornada, sino en todas las que quedan», siempre contando con el hecho de que «la afición se mantendrá con el equipo».
Un factor, el del graderío, que era incuestionable dada la habitual fidelidad de la hinchada rojiblanca a sus colores, pero que tras lo ocurrido entre semana puede volverse en contra del equipo local si el juego y, sobre todo, el resultado no es acorde a las expectativas. Para cerrar heridas, Tejada se apresuró a subrayar que está «orgulloso» del comportamiento de los jugadores «y muy especialmente del de los capitanes».
El preparador vasco, que concentrará hoy a sus pupilos después de comer -algo que no hacía Preciado- y podrá contar con su última adquisición, el delantero Adrián Colunga, avisó del juego rojillo, «bien definido, con muchas variantes arriba y bien clasificado tras una extraordinaria primera vuelta», pero ante el que «lo más urgente es sumar los tres puntos». N.M.
Tras el entrenamiento -se retrasa a las 11.00- en Tajonar, la plantilla comerá en las instalaciones rojillas para, a continuación, coger el autobús con destino Gijón. La hora prevista de llegada son las 20.30, mientras que la expedición osasunista regresará a Iruñea tras la finalización del choque en El Molinón, que se jugará a partir de las 12.00 de mañana.
Además de ser una sesión a puerta cerrada, poco se pudo ver respecto a los planes de Mendilibar para Gijón. Los jugadores realizaron juegos en espacios reducidos y rondos, por lo que habrá que esperar al entrenamiento de hoy para ver alguna pista. En cualquier paso, no parece que el once pueda diferir mucho del que perdió el lunes contra el Atlético.
