División en el CGPJ tras unas palabras de su portavoz sobre víctimas
Unas manifestaciones realizadas el pasado miércoles por la portavoz del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Gabriela Bravo, sobre el papel de las víctimas de ETA en el proceso abierto tras el cese definitivo de la lucha armada han causado división en el seno de este órgano.
En la inauguración de unas jornadas sobre Derecho Penal en la Universidad de Alicante, Bravo manifestó que las víctimas «no deben condicionar la evolución sociopolítica de la sociedad española», si bien subrayó «con la misma contundencia que la democracia no puede dar un solo paso a espaldas de las víctimas del terrorismo».
La primera parte de esta reflexión ha causado malestar entre algunos vocales del órgano de gobierno de los jueces, que declararon ayer, según aseguró la agencia Europa Press, que no puede decirse que sea eso lo que piensa el Consejo del Poder Judicial como institución.
Fuentes del CGPJ apuntaron que para algunos vocales es importante transmitir que las víctimas «deben ser oídas en todo el proceso penal» y no se puede minusvalorar su papel. «Con las víctimas no se puede jugar», censuraron.
Y advirtieron de que, si Gabriela Bravo no «rectifica», expresarán sus divergencias mediante una declaración pública.
Mayor Oreja interviene
En este intercambio dialéctico no faltó la opinión de Jaime Mayor Oreja, en cuya opinión las víctimas de ETA «siempre tienen razón» y deben «condicionarlo absolutamente todo».
El europarlamentario del PP argumentó que «los políticos tenemos que saber afrontar lo que es la injusticia de un crimen dando la razón siempre a las víctimas. No se trata de mirar para otro lado, ya que éstas no son un obstáculo para alcanzar la paz verdadera, lo que pasa es que sí lo son para el juego o para la negociación encubierta».