La nómina de los deportistas relacionados con el cine es muy amplia, porque los jugadores profesionales cuando se retiran tienen tiempo de sobra para dedicarse a otras actividades. Después de dejar el rugby, Philippe Guillard ha sabido reconvertirse en escritor, aunque también ha ejercido de periodista deportivo como tantos otros. La labor de guionista cinematográfico la ha desarrollado por completo a las órdenes del director Fabien Onteniente, con el que ha colaborado en «3 zéros», «People», «Camping», «Disco» y «Les turfistes».

Fue durante el rodaje de «3 zéros», diez años atrás, cuando escribió «Le fils à Jo» pensando en el actor Gérard Lanvin. Como esta historia de relaciones paternofiliales estaba ambientada en el mundo del rugby, decidió que resultaba ideal para dirigirla personalmente. El proyecto cristalizó con la entrada en la producción del actor Olivier Marchal, deseoso de cambiar de género y hacer algo diferente al polar con el que automáticamente se asocia su nombre.

Gérard Lanvin encarna al Jo del título original, una estrella del rugby perteneciente a un linaje de practicantes de dicho deporte. La tradición familiar ha de continuar, así que trata de preparar a su hijo para que domine el juego con el balón ovalado. Pero al chico no le va el ejercicio físico, ya que lo suyo son las matemáticas.

Lejos de resignarse, el padre no cejará en su empeño, llegando a crear un equipo para que pueda alinearse en él su retoño, ante la negativa de otros clubes a admitir al adolescente en sus filas. Todo ello contado de forma entrañable.