La tensión entre Venezuela y el Gobierno de facto de Paraguay ha aumentado tras la decisión del presidente bolivariano, Hugo Chávez, de retirar al personal militar destinado en la Embajada de su país en Asunción, por haber recibido «amenazas hasta la muerte» en el marco de la crisis provocada por el golpe de Estado institucional contra el presidente Fernando Lugo, y el rechazo del Senado paraguayo a la decisión del Mercosur de suspender a Paraguay y admitir a Venezuela.

El Senado paraguayo, que pidió suspender a los senadores que tildaron de «circo» el juicio político contra Lugo, había solicitado el mismo día la expulsión de esos agregados y la retirada de su embajador en Caracas, y declaró personas «non gratas» al canciller venezolano y a su embajador en Asunción.