Presenta un partido político su programa y buena parte del electorado se centra en debatir si los equipos de fútbol de élite seguirán, o no, participando en la denominada Liga de las Estrellas. Esta elección de prioridades no sé en qué lugar nos deja como sociedad madura y patatín y patatán, pero mejor dejar estas disquisiciones para otro día y centrarnos en el meollo del asunto.

Se trata de una discusión que se evitan los hinchas escoceses, a quienes «una mierda de liga» les viene de serie, ni siquiera necesitan ser independientes para ello. No tiene ningún mérito abandonar Gran Bretaña cuando de todos modos el rival del próximo domingo va a ser el Kilmarnock, y no el Manchester United. Los listos son los galeses, con selección propia y el Swansea jugando la Premier.

Más de uno se olvida, y conviene tenerlo claro desde el principio, que tanto los clubes deportivos como las federaciones y las ligas profesionales son entidades privadas. Vaya, que la NBA no necesitó pedir permiso a la Casa Blanca para incluir equipos canadienses entre sus franquicias. Era bueno para el negocio y ahí se acabó la discusión.

No obstante, a este lado del charco lo habitual -salvo excepciones como el Mónaco- es que las competiciones se disputen en el ámbito estatal. En ese caso, una hipotética independencia de Euskal Herria o Catalunya -o ambas naciones- desembocaría en la creación de dos nuevas ligas de fútbol. O en una competición vasco-catalana, ¿por qué no?

«Una mierda de liga», dicen. Es innegable que el nivel medio sería menor. A cambio, equipos como el Athletic y la Real estarían disputando competiciones europeas año sí y año también, como el Celtic de Glasgow, el Brujas belga o el Rosenborg noruego, por ejemplo. Para equipos de categorías inferiores como Eibar, Real Unión o Alavés todo son ventajas, comenzando por ahorrarse algunos viajes deficitarios a donde Jesucristo perdió las alpargatas. En todo caso, mejor nos iría con una liga de mierda y una tasa de paro inferior al 10%. Puestos a hacer demagogia, soy equipo de Champions.